Universidad de Costa Rica
Feria de oportunidades UCR.
Foto: Laura Rodríguez Rodríguez.Durante la primera mitad del año, unas 24.000 personas estudiantes reciben el apoyo del Sistema de Becas para avanzar en sus estudios. La cifra representa el el 54,17 % de toda la población estudiantil de la institución educativa, un porcentaje que se vuelve especialmente significativo en las sedes universitarias.
La Oficina de Becas y Atención Socioeconómica contempla varias categoría de apoyo para que las personas estudiantes en condición académica vulnerable, con rendimieto sobresaliente o que representan la UCR en deporte y arte puedan ingresar, mantenerse y graduarse en la UCR. Las becas socioeconómicas, particularmente representan un gran apoyo para miles de estudiantes que, de otro modo,tendrían grandes dificultades o no podrían acceder a la educación universitaria. De las personas estudiantes con becas socioeconómicas, el 91% proviene de colegios públicos, lo que subraya la importancia de este apoyo en la promoción de la movilidad social ascendente.
Las becas socioeconómicas cubren una amplia gama de beneficios como: a exoneración total o parcial de los costos de matrícula y otros servicios esenciales como: laboratorio, actividad deportiva y graduación. Además, dependiendo de la categoría de la beca, los estudiantes pueden recibir apoyo complementario de servicios de odontología, oftalmología, pago de transporte, alimentación y residencias; lo que les permite concentrarse plenamente en sus estudios.
La Universidad de Costa Rica también ofrece becas para participar en diversas actividades universitarias, que benefician a 7.700 estudiantes. Estas becas están destinadas a reconocer la participación, representación y excelencia académica. A diferencia de las becas socioeconómicas, estas no están vinculadas a la condición económica de los estudiantes, sino que premian el desempeño y la contribución al quehacer universitario. Además, existen becas externas que, a través de convenios con entidades externas, proporcionan apoyo económico adicional a los estudiantes con bajos recursos.
Si bien es cierto, de las 23.895becas socioeconómicas otorgadas, la sede Rodrigo Facio concentra la mayoría de designaicones con14.466 personas estudiantes becadas, responde a que la sede universitaria en San Pedro es la que más persona estudiantes asisten a sus clases. Sin embargo, las becas juegan un papel crucial en las sedes regionales, que se han convertido en puntos clave para el acceso a la educación superior en áreas alejadas.
Durante el 2023, la mayoría de las personas estudiantes de las distintas sedes de la Universidad de Costa Rica contaban con algún tipo de beca para continuar sus estudios. En la Sede del Caribe, el 85% de la población estudiantil se benefició del Programa de Becas, mientras que en la Sede del Pacífico, el 81% recibió apoyo económico. En la Sede de Occidente el 79.9% de los estudiantes también contaba con una beca, y en Guanacaste, el 78% fue beneficiado. Realmente, la posibilidad de acceder a una beca universitaria puede ser la diferencia entre completar una carrera o abandonar los estudios.
Para muchas personas estudiantes de zonas rurales, vivir lejos de casa y cubrir los gastos de alojamiento puede convertirse en una barrera insuperable. Aquí es donde entran en juego las residencias estudiantiles de la Universidad de Costa Rica, que brindan un hogar temporal para los estudiantes que provienen de las zonas más distantes del país.
Nicole González, estudiante de la Universidad de Costa Rica, de la zona de La Palmera de San Carlos, comentó que desde pequeña soñaba con entrar a la Universidad de Costa Rica y actualmente se hizo realidad. Lo considera un privilegio y está muy agradecida con la universidad por la opción de residencia y becas económicas que les permiten a las personas que de verdad lo necesitan cumplir ese sueño de estudiar en una universidad. Nicole expresó sus opiniones sobre cómo es vivir en residencia:
“Es un poco diferente porque uno tiene que adaptarse a un nuevo ambiente, pero yo siento que todo está en intentar tener resiliencia y poder adaptarse, conseguir nuevos amigos, tener un poco de empatía con las demás personas y poner de su parte”.
El impacto del Programa de Residencias Estudiantiles es profundo porque ofrecen un lugar seguro y económico para vivir y crean un ambiente propicio para el desarrollo académico y personal. Para muchos estudiantes, las residencias representan la única manera en que pueden seguir sus estudios. De no contar con este recurso, regresar a sus hogares en zonas alejadas significaría perder la oportunidad de continuar su proyecto universitario.
El sistema de becas y residencias de la Universidad de Costa Rica abre las puertas de la educación superior a miles de estudiantes de todo el país . Este apoyo permite que muchos jóvenes, especialmente de zonas alejadas de la Gran Área Metropolitana, superen obstáculos económicos y de distancia para alcanzar sus metas académicas y construir un mejor futuro.