Jhon Fonseca Ordóñez, docente, investigador y coordinador del Monitor OCDE-UCR

Foto: Laura Rodríguez Rodríguez.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) es un organismo internacional que busca fomentar políticas que favorezcan el bienestar económico y social a nivel global. La OCDE proporciona un foro en el que los gobiernos pueden colaborar, intercambiar experiencias y encontrar soluciones a problemas compartidos, a partir de los datos y el análisis comparativo objetivo y riguroso.

El 25 de mayo de 2021, Costa Rica se convirtió en el miembro 38 de la OCDE, lo cual vino a consolidar el compromiso del país con las mejores prácticas internacionales y a abrir nuevas oportunidades para el desarrollo sostenible y la cooperación internacional. Este logro fue el resultado de un proceso de adhesión que inició de manera formal en el 2015 y que implicó una revisión exhaustiva de las políticas y prácticas del país en áreas como gobernanza pública, competencia, educación y ambiente.

Desde su adhesión a la OCDE, Costa Rica ha experimentado beneficios tangibles. La membresía ha permitido al país acceder a un vasto acervo de conocimientos y mejores prácticas internacionales, esenciales para diseñar e implementar políticas públicas de alta calidad.

Además, la OCDE ha sido un catalizador en el desarrollo de una cultura de políticas públicas basada en la evidencia. La integración de datos y análisis rigurosos en la formulación de políticas garantiza que las decisiones se tomen sobre una base científica, mejorando la eficacia y la transparencia en la administración pública. Esto se traduce en beneficios concretos para el gobierno central, las instituciones descentralizadas y los gobiernos locales.

Ser miembro de la OCDE es sinónimo de excelencia en gobernanza, transparencia y eficiencia, lo que contribuye a fortalecer la confianza internacional en la estabilidad y calidad institucional de Costa Rica. La participación del país en esta organización actúa como un sello de garantía para los inversionistas, asegurando que Costa Rica cumple con rigurosas directrices internacionales, a la vez que mantiene un firme compromiso con el desarrollo sostenible y la transparencia. La adhesión hace que se mejore la percepción global de Costa Rica, atrae más inversiones y fortalece su posición en el mercado internacional.

Por su parte, la OCDE se destaca por su rol como generador de estándares internacionales.  Por ejemplo, en educación, promueve estándares mediante evaluaciones internacionales como PISA (Programme for International Student Assessment), que permiten a los países medir y comparar el rendimiento educativo de los jóvenes de 15 años. En el ámbito de la inteligencia artificial, la OCDE ha desarrollado los Principios sobre Inteligencia Artificial, los primeros estándares intergubernamentales en esta área, que guían a los países para asegurar que el desarrollo y uso de esta tecnología sea responsable y se centre en el bienestar humano.

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En el ámbito de la fiscalidad internacional, BEPS (Base Erosion and Profit Shifting) es una iniciativa clave de la organización para combatir la evasión fiscal a nivel global. Este proyecto pretende que las empresas multinacionales paguen impuestos donde realmente realizan sus actividades económicas significativas. Además, introduce un impuesto mínimo global para evitar la competencia fiscal perjudicial entre países.

Otro ejemplo destacado es la Convención Anticohecho de la OCDE, que establece un marco para combatir el soborno de funcionarios públicos extranjeros en transacciones comerciales internacionales, promoviendo un entorno empresarial más justo y transparente.

En el ámbito del futuro del trabajo, la OCDE investiga y desarrolla políticas para enfrentar los desafíos y oportunidades que surgen con la automatización, la digitalización y los cambios demográficos. Esto incluye promover habilidades y competencias relevantes para el siglo XXI, apoyar la transición justa hacia nuevos modelos laborales y asegurar que las políticas de protección social se adapten a las nuevas realidades del mercado laboral.

Dada su relevancia demostrada para el país, el Monitor OCDE de la Universidad de Costa Rica (UCR) sigue de cerca las actividades de la organización y busca fomentar la colaboración estrecha entre la academia y el gobierno.  La UCR, líder en innovación, investigación y desarrollo, pretende ser una aliada estratégica del Gobierno de Costa Rica en la implementación de las recomendaciones y mejores prácticas que establece la OCDE, para así aumentar la eficiencia y transparencia del aparato público y mejorar la vida de los habitantes del país.

Como herramienta esencial, el Monitor OCDE de la UCR facilita esta colaboración, permitiendo que la universidad actúe de manera oportuna y estratégica en la adopción de las recomendaciones de la OCDE. Al traducir el conocimiento académico en acciones concretas, el Monitor OCDE de la UCR tiene el potencial de fortalecer la gobernanza y promover un desarrollo sostenible e inclusivo para el país.