La Universidad de Costa Rica (UCR) da un nuevo paso significativo que ayudará a salvar vidas. Esta vez, por inaugurar su primera sala especializada para la donación de sangre en el campus universitario.

Esta sala, que parte de un esfuerzo del Laboratorio Clínico y Banco de Sangre de la Oficina de Bienestar y Salud (OBS), —y ubicada en el nuevo edificio de la OBS, Finca 3—, busca fomentar la cultura de la donación de manera totalmente altruista y voluntaria.

El objetivo no es solo motivar a la comunidad universitaria, sino también al público en general, a fin de ampliar el efecto positivo que posee la donación de sangre para la sociedad, mismos que se verán reflejados en cada vida que será salvada. 

De acuerdo con el Dr. Gerardo Calvo Salas, especialista en Banco de Sangre e Inmunohematología  —y encargado de la promoción de la donación en la UCR— una sola bolsa de sangre donada puede salvar hasta tres vidas e impactar positivamente a muchas más.

“La iniciativa de crear una sala de donación de sangre surge cuando el Hospital del Trauma, en conjunto con la UCR, crean un convenio para que nosotros les brindemos los servicios transfusionales a este hospital. Cuando asumimos ese compromiso, la necesidad de sangre se volvió un requerimiento constante. Por eso, siempre tenemos que estar buscando donantes para poder satisfacer las necesidades de hemocomponentes y atender a las personas que son víctimas de accidentes de tránsito o laborales. Ante esto, surgió la idea de generar esta sala de donación a fin de tener un espacio más para colectar este líquido vital”, especificó el Dr. Calvo.

Desde 2015, la UCR ha realizado campañas móviles de donación en diferentes facultades a nivel interno de la institución y en muchas empresas que se han sumado a donar. No obstante, contar con la primera sala fija permite brindar una mayor estabilidad en la colecta, así como un acceso más fácil y conveniente para quienes deseen donar en la UCR. 

"El tener esta sala es un elemento facilitador porque las personas ya no necesitan sacar tanto tiempo para asistir a un banco de sangre externo. Ellas y ellos pueden donar en nuestro campus y volver a sus actividades rápidamente", explicó el Dr. Calvo.

La nueva sala de donación de la UCR es más que un espacio físico; es una herramienta crucial para salvar vidas y una invitación a todas y todos para ser parte de un esfuerzo colectivo que beneficia a toda la sociedad en su conjunto.

Foto: Laura Rodríguez Rodríguez.

Innovación de vanguardia

La nueva sala de donación de la UCR no solo se destaca por su funcionalidad, sino también por el uso de tecnología avanzada y por sus altos estándares de calidad en el proceso de donación. 

La sala está equipada con sillones automatizados y un sistema semiautomatizado para el fraccionamiento de hemocomponentes realizado por personal altamente calificado y sin perder de vista el enfoque humanista. De esta manera, el Laboratorio Clínico y Banco de Sangre asegura una experiencia cómoda y segura para todas las personas donantes.

Asimismo, un aspecto clave que diferencia al Banco de Sangre de la UCR de otros, es la implementación de pruebas de detección de ácido nucleico (NAT). Estas pruebas permiten identificar el ADN de virus como el VIH, hepatitis B y C más rápido, lo que posibilita detectar infecciones tempranas.

Dichas pruebas, combinadas con los exámenes serológicos tradicionales, garantizan que la sangre colectada sea de la máxima seguridad posible, lo cual es fundamental para los receptores de estas donaciones.

"Nosotros contamos con un personal especializado en la atención de donantes y, algo muy importante, es que están comprometidos y sensibilizados con la importancia de donar. Nuestra prioridad es dar el mejor servicio posible y la mejor atención para las y los donantes de sangre, porque es lo que se merece cada persona que brinda algo de sí para ayudar a salvar una vida", destacó el Dr. Calvo.

Esto ya lo comprobó el Dr. Gustavo Gutiérrez Espeleta, rector de la UCR, y quien ha sido donante frecuente desde hace muchos años. El lunes 7 de octubre del 2024, el Dr. Gutiérrez se convirtió en la primera persona en donar sangre en este nuevo espacio.

“Como el primer donante de sangre debo decir que no hay que temerle a este acto de solidaridad. Hay personas expertas con muy buenas manos, sillas cómodas, especializadas y no hay dolor. Siempre debemos pensar en este acto como una acción de solidaridad y humanismo que estamos haciendo por seres humanos que no conocemos”, comentó el Dr. Gutiérrez Espeleta.

Conozca un poco la nueva sala de donación de sangre

¿Cómo donar?

Esta sala está abierta tanto para personas miembros de la comunidad universitaria como para el público en general. 

Cualquier persona que cumpla con los requisitos básicos, como ser mayor de edad, estar en buen estado de salud, pesar más de 50 kilogramos y no haber experimentado síntomas de gripe o enfermedad en los últimos 15 días, puede acercarse a donar.

Eso sí, la sala funciona bajo un sistema de citas que permite una gestión organizada y eficiente del tiempo. Para ello, la persona interesada primero debe acceder a la página web en https://lcucr.com/bancodesangreucr/ en la cual podrá autogestionar su cita y hacer un autotest que verificará su elegibilidad como donante.

Posteriormente, se le recomienda a las personas que donarán que descansen bien la noche anterior, se hidraten de manera óptima y que consuman un desayuno ligero antes de la extracción de la sangre. Este debe excluir alimentos grasosos, pesados o lácteos para que el proceso sea más fluido y se reduzca el riesgo de malestar durante la donación.

En estos momentos, el horario de atención es de 7:00 a. m. a 11:00 a. m., los días lunes, martes y miércoles. 

La sala de donación se ubica en el nuevo edificio de la OBS, Finca 3, de la sede Rodrigo Facio. Actualmente, se ofrecen tres citas por hora, lo que permite atender hasta 15 donantes al día.

“Donar es un acto de amor, de solidaridad y de altruismo que reconforta el alma. Cuando las personas deciden superar sus miedos, y volverse donantes de sangre, van a tener una satisfacción que muy pocas cosas en la vida lo pueden brindar: estar consciente de que está salvando una vida. Esta es una sensación única”, alentó el Dr. Calvo. 

La expectativa es que, con el tiempo, esta sala se convierta en un referente en la región para la donación de sangre, y se promueva una cultura de solidaridad y de altruismo entre la comunidad universitaria y el público en general.