Con el propósito de salvaguardar aquellos documentos impresos y digitales, albergados en bibliotecas, archivos y museos, que constituyen piezas de gran importancia en la historia del país, el Comité Nacional de Memoria del Mundo realizó la ceremonia de incorporación al Registro Nacional de Memoria del Mundo de la Unesco, Costa Rica 2023.
En esta edición, fueron nueve los documentos, fondos y series que ingresaron. Dentro de éstos se encuentran la colección de caricaturas de Hugo Díaz Jiménez (1930-2001), postulada por el Museo de la Universidad de Costa Rica (Museo UCR); el fondo documental “Marcha de la Universidad” (1941), postulada por el Archivo Histórico Musical de la Escuela de Artes Musicales de la UCR; y la colección de "Ediciones Semanario Universidad", presentadas por el Archivo Universitario Rafael Obregón Loría de la UCR.
Además, ingresaron el expediente de la Anexión del Partido de Nicoya a Costa Rica, presentado por el Archivo Nacional; la colección de obras patrimoniales sobre la Campaña Nacional 1856-1857, postuladas por la Benemérita Biblioteca Nacional “Miguel Obregón Lizano” y la Academia Morista Costarricense; el fondo documental de Producción documental del Departamento de Cine y del Centro Costarricense de Producción Cinematográfica 1973-1989, y el filme “El Retorno”, postulados por el Centro Costarricense de Producción Cinematográfica del Ministerio de Cultura y Juventud.
Así como los Expedientes de Proyectos de las Artes Literarias, postulados por El Colegio de Costa Rica; y el fondo documental Memorias de la Secretaria de Instrucción Pública y del Ministerio de Educación Pública 1888-2018, postulado por el Archivo Central del Ministerio de Educación Pública.
Magda Cecilia Sandi, coordinadora del Comité Nacional de Memoria del Mundo y decana de la Facultad de Educación de la UCR, señaló que “la conservación de patrimonio documental impreso y digital en Costa Rica y en el mundo es una tarea impostergable que requiere de la articulación y esfuerzo conjunto de instituciones gubernamentales, públicas y privadas para que las próximas generaciones puedan conocer, acceder y compartir la memoria de nuestro pueblo”.
Por su parte Vera Beatriz Vargas, viceministra de Cultura y Juventud, destacó los esfuerzos interinstitucionales que realiza el país para garantizar, conservar, preservar y proteger el patrimonio documental del país.
“El Ministerio de Cultura y Juventud cree en este proceso de reconocimiento, e incorporación, trabajamos también por el resguardo del patrimonio cultural, no solo lo que nos es encomendado por ley si no que tratamos de incentivar en las comunidades cuidar sus legados”.
El Programa Memoria del Mundo, de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) se creó en 1992 con el propósito de hacer conciencia en los países sobre la necesidad de conservar el patrimonio de la humanidad para las futuras generaciones.
Como parte de este trabajo en el año 2006 inició actividades el Comité Nacional de Memoria del Mundo (CNMM) adscrito a la Comisión Costarricense de Cooperación con la Unesco. Este comité está integrado por personas que representan a diferentes organizaciones ligadas al tema del patrimonio y los documentos.
Desde el año 2014, el Museo UCR resguarda la obra completa del caricaturista Hugo Díaz Jiménez (1930-2001).
Esta colección está conformada por 4996 ítems, los cuales incluyen caricaturas originales, copias, pruebas editoriales, afiches y otros impresos. En su mayoría, las caricaturas que conforman la colección fueron producidas entre 1970 y el 2001. También se encuentran trabajos anteriores; incluso, hay caricaturas y dibujos realizados por Díaz durante su niñez y adolescencia.
La obra de Díaz constituye una crónica de la vida cotidiana de los y las costarricenses y de los acontecimientos políticos del país.
Uno de los símbolos universitarios es la Marcha de la Universidad del compositor costarricense Julio Mata Oreamuno.
Según el Comité Nacional de Memoria del Mundo, "es de indiscutible importancia testimonial, ya que los símbolos son emblemas que cumplen la función de crear vínculos que promueven identidad y arraigo hacia las raíces históricas, sociales y culturales."
La totalidad de las obras manuscritas autógrafas e impresas de Mata Oreamuno se encuentran resguardadas y conservadas en el Archivo Histórico Musical desde el 2013, cuando fueron donadas a la Universidad de Costa Rica por sus hijos en representación de su padre Félix Mata.
El Archivo Universitario Rafael Obregón Loría (Aurol) es la instancia encargada de custodiar los ejemplares del Semanario Universidad, desde su primera publicación en 1971 hasta la fecha.
Esto garantiza el estado idóneo de los ejemplares, dado que la conservación de documentos es un área específica y que requiere de condiciones adecuadas.
Su resguardo es importante para la historia y la cultura, pues aquí se encuentran los principales acontecimientos de la vida institucional, nacional e internacional, que permiten a la sociedad opinar e interpretar los hechos y contribuir con la formación de una opinión pública crítica e informada sobre los asuntos relevantes.
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