Un equipo colegiado técnico de la Universidad de Costa Rica (UCR) visitó recientemente la Reserva Biológica Alberto Manuel Brenes de la Sede de Occidente, con el fin de iniciar el proceso que permita platear un plan remedial para subsanar algunas carencias que presenta la Estación Rodolfo Ortiz, y de esta forma, volver a activar el inmueble para la investigación y la docencia.
La coordinación general del trabajo está a cargo de la Unidad de Gestión Ambiental (UGA) y cuenta con la participación de funcionarios de la Oficina Ejecutora del Programa de Inversiones y con el Consejo Asesor de la Reserva Biológica Alberto Manuel Brenes.
De esta forma, alrededor de 16 profesionales se hicieron presente en la estación e inspeccionaron todos los detalles que se deben atender, entre ellos: la potabilización del agua, la disposición de aguas residuales, mejoras en las condiciones de la cocina y un plan de manejo de residuos y emergencias.
La Ing. Kathia Elizondo Orozco, coordinadora de la UGA, aseguró que la visita es importante para realizar un análisis en el sitio, tomar los datos necesarios e iniciar una sana discusión del equipo técnico para valorar todas las alternativas. Indicó que se pretende presentar una propuesta integral que permita abrir la estación de forma paulatina, buscando las rutas más sencillas avaladas por la legislación.
“La intención inicial de todos los aquí presentes y de rectoría es que esto funcione, buscar soluciones, que funcione aunque sea con 5 personas, y ya posteriormente vemos como recuperamos y la ponemos a trabajar con más capacidad” aseguró.
La Mag. Sofía Martorel Esquivel, gestora de la Oficina Ejecutora del Programa de Inversiones, coincidió con Elizondo en que el objetivo final es habilitar la estación ya que es un proyecto prioritario de rectoría. Destacó que esta visita les permite valorar el aporte que se debe dar desde su oficina y comulgar criterios con los demás profesionales para desarrollar un trabajo integral.
Por su parte, el Dr. Bryan Gómez Vargas, coordinador de Investigación de la Sede y del Consejo Asesor de la Reserva, se mostró complacido con la visita. “A pesar de todo lo complicado que ha sido, el avance de ver tantas personas aquí con un interés en el trabajo que se desarrolla nos da esperanza de que esto vaya a poder caminar de alguna u otra forma. Buscamos una apertura gradual y acorde a los lineamientos de la institución. Me llena de alegría la visita y nos llevamos el compromiso de generar un plan de visitación”.
Señaló que para la Coordinación de Investigación este proyecto es de suma importancia, ya que a pesar de que sí se puede ingresar a la reserva, la estación es un medio que permite generar investigación.
Manuel Alfaro Alpízar, administrador-director de la Reserva por parte del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac), acompañó al equipo técnico en esta visita. Él destacó que para el Sinac es muy importante retomar en conjunto con la universidad el comanejo de una área protegida como esta, ya que es un área geográfica significativa para la conservación. “Las alianzas son importantes para poder dar respuesta a las necesidades de conservación del país”.
Explicó que habilitar la estación para la investigación y la docencia es fundamental ya que este es un punto de control para evitar el ingreso de cazadores y de personas dedicadas a la tala. “La conservación genera investigación, conocimiento y recursos a la comunidad. La universidad tiene mucha capacidad para devolver esa información a la sociedad, porque la población tiene que estar informada de lo que genera un área silvestre protegida, la cantidad de recursos que se producen aquí, la electricidad que produce estas aguas, las fuentes de empleo, los negocios que se generan, es una cadena de eventos que dan bienestar a la región y al país”.
El Dr. Randol Villalobos Vega, director de la Reserva por parte de la Universidad de Costa Rica, celebró el proceso que inicia con esta visita ya que muestra el interés de las autoridades de la Universidad de Costa Rica y de la Sede de Occidente por reabrir la estación. Destacó que “tenemos un mandato respaldado por una ley de la república y por un convenio firmado con el Sinac, en donde nos comprometemos a apoyar esfuerzos de investigación, docencia y conservación”.
Es por ello que durante los últimos años se han generado una serie de acciones desde la Sede de Occidente y la dirección de la reserva para avanzar en este proyecto. Villalobos destacó que dentro de esas acciones se ha intentado darle un mantenimiento básico a la estación para evitar un deterioro mayor.
A la vez, se ha trabajado en conjunto con la carrera de Gestión del Recurso Hídrico, específicamente con el profesor Mag. Edwin Barrantes Barrantes y sus estudiantes, quienes desarrollaron una propuesta de un acueducto y otra de una biojardinera para la disposición de aguas residuales, ambos con todos los estudios técnicos necesarios.
La bióloga Mag. Karen Sibaja Granados realizó un inventario de las especies de murciélagos que visitan la estación con el fin de realizar un plan de manejo con todo el conocimiento científico que se requiere. Además, se está trabajando un plan de emergencias y un protocolo de limpieza y desinfección.
Villalobos mencionó que todos insumos son aportes generados desde diferentes instancias de la Sede, y van a servir para el trabajo que va a desarrollar la comisión técnico científica