Centros educativos y grupos organizados pueden contar con el apoyo del proyecto de Trabajo Comunal Universitario de la Sede de Occidente, Promoción de la educación vial en la región de Occidente, que organiza talleres y actividades educativas para fortalecer el tema, por medio de espacios de reflexión y concientización de las personas beneficiarias para una movilidad peatonal y vehicular más segura en las comunidades.
El proyecto cuenta con el apoyo de la Dirección de Proyectos del Consejo de Seguridad Vial (Cosevi), quienes ofrecen capacitación a los estudiantes universitarios y facilitan materiales para los talleres.
Promoción de la educación vial en la región de Occidente inició en el 2022 y durante ese año ofreció 374 talleres a centros educativos de Poás, San Ramón, Grecia y Sarapiquí.
La Mag. Grettel Loría Madrigal, responsable del TCU, señaló que la Sección de Educación Inicial de la Sede propuso este proyecto como respuesta a una necesidad sentida, ya que consideran que a nivel general existe un vacío sobre el tema, principalmente en poblaciones de primaria y educación inicial, ya que actualmente no se abarca en los programas del Ministerio de Educación Pública.
Explicó que cada grupo de estudiantes que se inscribe en este proyecto recibe tres capacitaciones por parte del Cosevi, y que a partir de allí, los jóvenes planiifican talleres para diferentes edades con temas como: señales de transito, cómo ser un peatón, cómo ser un pasajero, dispositivos de seguridad, caminos seguros, busetas escolares, cómo ser un conductos responsable de las bicicletas y las motocicletas, entre otros.
Además, para personas adultas y adultas mayores, se han organizado talleres sobre los diferentes capítulos del “Manual del conductor”, derechos a nivel de transporte público y cómo ser peatones y pasajeros.
Loría aseguró que la experiencia de este primer año les permitió confirmar la importancia y la necesidad de la educación vial en la sociedad costarricense, ya que fueron superadas las expectativas al atender a más 1300 personas.
La estudiante Fabiola González Ledezma, de 5to año de la carrera de Derecho, realizó este TCU y actualmente colabora como asistente del proyecto
Ella resaltó la importancia de este nuevo proyecto ya que “la educación vial es muy amplia y el país cuenta por muy pocos recursos para abarcar toda la población”. Ella considera que desde un TCU de la Universidad de Costa Rica se está ayudando a educar a la sociedad sobre un tema de interés general, un tema que afecta a todos los seres humanos durante toda la vida.
Destacó que participar en este proyecto le permitió no solo aportar a la sociedad, sino adquirir conocimientos de suma importancia para ella y su familia “transmitir este mensaje me sirvió mucho a mí, para aprender y ser una ciudadana más responsable” aseguró.
La Licda. Carol Benavides Morales, el Lic. Jeremy Corrales Zamora y la Licda. Jeannina Reyes Ramírez de la Dirección de Proyectos del Cosevi, son los integrantes del equipo de facilitadores del proceso de capacitación que reciben los estudiantes de la Sede.
Ellos explicaron que “una de las principales necesidades que enfrenta el país en cuanto a la educación vial se enfoca en la cultura del costarricense, ya que pese a que existe una cultura vial, está no es la más idónea, y para mejorar esta situación se requiere educar por medio de procesos que inicien con las personas más pequeñas en el tema de movilidad y seguridad vial, así como trabajar con los usuarios adultos que ya se mueven independientes en el sistema de tránsito”.
A la vez, según este equipo facilitador, la necesidad de educar y reeducar a la población en la temática de movilidad y seguridad vial genera otra gran necesidad, que corresponde a contar con alianzas o personas que se interesen en fungir como agentes multiplicadores desde sus centros de estudio, trabajo, comunidades, entre otros, para lograr llegar a más población y generar ese cambio de cultura tan necesario.
De acuerdo a estas necesidades, los funcionarios de Cosevi consideran que este TCU permite, más allá del objetivo final del proyecto como tal, trabajar y educar a usuarios jóvenes, que replicarán el mensaje y, a la vez, se están educando ellos también. Consideran este punto de suma importancia, ya que según las estadísticas, las poblaciones con mayor mortalidad oscila entre los 16 y 29 años, entonces este proyecto es “una ventana de oportunidad ya que abre la puerta a la educación y reeducación en movilidad y seguridad vial.”
Además, mencionaron que otro de los aportes que ofrece este TCU es el conocimiento que se transmite a la población, con el que se busca realizar ese cambio de cultura para proteger la vida propia y de los demás en el sistema de movilidad y transporte.
Concluyeron que la creación de este proyecto es un paso importante para abrir puertas a más aportes similares. “Este es un tema multifactorial y multisectorial por lo tanto la integración de la UCR a estos procesos para abrir espacios de jóvenes trabajando con jóvenes resulta necesario. Estos proyectos deben buscar la forma de ser sostenibles en el tiempo para que a través de los estudiantes universitarios se genere una masa de jóvenes integrados con conocimiento, formados y educados en el sistema de tránsito y con posibilidad de análisis y discernimiento al momento de tomar decisiones en carretera”.