Especial de movilidad e infraestructura vial

Incofer: relato de un descarrilamiento político

La presidencia ejecutiva del Incofer sufrió un sonado cambio de timón durante la elaboración de este reportaje.

Como parte de la historia del “quita y pon” que sufren los diferentes proyectos relacionados con el tren de pasajeros, mientras se elaboraba este reportaje la Administración de Rodrigo Chaves Robles decidió despedir a Mario Arce Guillén, ahora expresidente del Incofer, el pasado 15 de marzo.

Hasta aquel momento, el exjerarca impulsaba cuatro proyectos para expandir el uso del tren: el Tren Rápido de Pasajeros (TRP) entre San José y Cartago, el Tren Eléctrico de Carga (Telca) entre Sarapiquí de Heredia y Moín, la rehabilitación del tren de carga y pasajeros al Pacífico y, por último y más recientemente, un tren autónomo —sin conductor— que iría desde el Aeropuerto Juan Santamaría a tres puntos de la ciudad de Alajuela y que conectaría con el ramal del Incofer que ya existe. Este último ya inició sus estudios de prefactibilidad.

Al cierre de este reportaje, el futuro concreto de estas cuatro iniciativas es una incógnita, pues aunque el nuevo jerarca de Incofer, Álvaro Bermúdez Peña, asegura que dará continuidad a cada uno de ellos, aún no tiene definidos ni los plazos ni los costos. De hecho, también asegura que no puede dar garantía de que estos se puedan ejecutar antes de que termine esta administración.

"Dime que te diré"

En lo político, la destitución también tuvo su historia: una semana antes de su salida, Arce contradijo al ministro de Obras Públicas y Transportes (MOPT), Luis Amador Jiménez, quien aseguró al medio digital El Observador que el proyecto del TRP no iba a quedar listo en esta administración.

Pocos días antes de esas declaraciones del jerarca del MOPT, el expresidente ejecutivo del Incofer había dicho en una entrevista para este reportaje que el TRP era el principal proyecto de pasajeros de esta administración. Por eso, fue necesario volverlo a contactar para saber, a ciencia cierta, el futuro de esta iniciativa.

En esta nueva oportunidad, Arce mantuvo que el TRP se concluiría en este Gobierno si los trámites de factibilidad se agilizaban. Además, aclaró que la afirmación del ministro era errónea, ya que en ningún momento había sido consultado al respecto por el MOPT.

A la vez, informó que si bien hubo atrasos en los estudios, esto ocurrió debido a algunos contratiempos que hubo en contrataciones de los estudios previos, cuyo financiamiento y trámite dependían del Banco Centroamericano y de Integración Económica (BCIE).

Coincidencia o no, dos días antes de su destitución, el expresidente del Incofer solicitó en la Asamblea Legislativa la exclusión de esa institución de la regla fiscal, bajo el argumento de que esta le impide invertir al Incofer ₡800 millones en infraestructura, mantenimiento, equipamiento, personal y otros rubros.

Más allá de quién esté al mando del Incofer, el coordinador del Programa de Investigación en Desarrollo Urbano Sostenible (Produs), Jonathan Agüero Valverde, criticó estos vaivenes políticos y señaló que es necesario que el país se decante por una opción de modelo de tren y dejar de lado los orgullos personalistas que muchas veces dan al traste con la continuidad de los diferentes modelos.

“Se nos van cuatro años con cada nuevo proyecto. Lo que hay que hacer es tomar uno y mejorarlo. Cada presidente y cada jerarca quiere un tren a su medida y eso no es posible. Nunca va a haber ningún tren que sea perfecto, pero es mejor uno que esté operando a uno que nunca se consolide. Es hora de dejar atrás el mismo esquema de transporte público que tenemos desde hace 40 años, pero para esto es necesario que haya decisión política”, manifestó el experto.

Agüero, además, criticó la poca cantidad de ingenieros que trabajan en el Incofer (solo cuatro en este momento) y en otros organismos involucrados en este tema, como el MOPT o el Consejo de Transporte Público, lo cual debilita su función y sus criterios técnicos para mejorar la movilidad del país.