Desde muy pequeña, Jemily Gónzalez Serrano soñó con estudiar y convertirse en profesional, su deseo de salir adelante se está concretando gracias a su esfuerzo y dedicación, al apoyo de su familia, y a la oportunidad de recibir una beca de la Universidad de Costa Rica.
Actualmente ella cursa la carrera de Ingeniería Química en la Sede Rodrigo Facio de la Universidad de Costa Rica; al ser oriunda de Guayabo de Santa Cruz de Turrialba, decidió solicitar apoyo del Programa de Residencias Estudiantiles UCR, dejar a su familia y pueblo natal para estudiar la carrera de su interés.
Ella es la primera persona de su familia que logra estudiar en una universidad pública, sus padres no tuvieron esa posibilidad debido a las limitaciones económicas. Toda su familia agradece el apoyo que la UCR le está brindando para estudiar.
“Para mí el Programa de Residencias Estudiantiles de la UCR significa un montón de oportunidades, porque al venir de una zona alejada es difícil adaptarse al entorno, pero yo siento que resi lo hace más llevadero, al estar rodeado uno de compañeras y compañeros con situaciones similares, y al tener una beca de apoyo, y sobre todo al tener un espacio para estudiar y para estar con todas las comodidades, mientras uno se desarrolla como profesional; de verdad que es gracias a este programa que yo puedo estudiar lo que me gusta; y esto ha significado algo increíble para mí y para mi familia, porque significa poder expandir las fronteras” dijo Gónzalez.
Con gran emoción, Jemily recordó cómo durante su etapa de escuela, ella anhelaba poder ir a estudiar porque sus padres no podían sufragar todos sus gastos de estudio, por lo que ahora al tener la oportunidad de beca en la UCR siente mucha satisfacción y gratitud.
“Yo recuerdo que lo que hacía cuando estaba en la escuela era no gastar el monto que me daban mis papás para la alimentación, para ahorrar ese dinero y poder ir todos los días a las escuela, como la plata no alcanzaba, mis papás lo que hacían era pedirnos a cada una de las tres, que no fuéramos un día a la semana a clases para que rindiera el dinero; por eso ahora yo me siento muy feliz y sé que es un orgullo para mi familia el que la UCR me otorgue una beca y el beneficio de residencias estudiantiles para poder estudiar la carrera que elegí, porque esto ha sido el resultado del esfuerzo de toda mi familia” manifestó Gónzalez.
Jemily ahora trabaja fuerte en sus estudios y espera culminar con éxito su carrera para poder apoyar económicamente a su familia. “Mi deseo es poder ejercer como ingeniera, y ayudar a mis padres económicamente, también tengo la meta de aportar con mis conocimientos a la comunidad y al país en general” dijo.
Al igual que Jemily, alrededor de 14 mil personas han logrado concretar su proyecto académico, en las últimas dos décadas, gracias al apoyo del sistema de becas y al Programa de Residencias Estudiantiles de la Universidad de Costa Rica. La mayoría de estos profesionales se encuentran aportando al país, en cada una de sus áreas del conocimiento, desde una visión humanista y de bien común.
El Dr. Sixto Bogantes Ledezma forma parte de los miles de egresados, al cual el Programa de Residencias Estudiantiles de la UCR les transformó la vida y les dio una oportunidad de servir al país. Él es médico especialista en Neurología y trabaja para el Hospital Nacional de Niños. Durante más de diez años, él se ha enfocado en la investigación y búsqueda de alternativas para el bienestar y calidad de vida de niñas y niños que sufren enfermedades como epilepsia, encefalitis, drepanocitosis, síndrome de West, entre otros. Actualmente también es docente e investigador de la Escuela de Medicina de la UCR.
“La UCR es sin duda una institución que cambia la vida de las personas en este país, es un espacio que da oportunidades a las personas que por supuesto quieren aprovecharlas… en mi caso empecé a estudiar en la institución en el año 2000, la carrera de Medicina, y siendo de Atenas mis posibilidades para viajar y estudiar eran limitadas, y fue así donde el Programa de Residencias me brindó acogida, y digo acogida porque el programa trasciende el concepto de ser únicamente un lugar para dormir y estudiar, y llega a convertirse en un segundo hogar para quienes vivimos esta experiencia de convivir con otros estudiantes, que al igual que uno persiguen el sueño de estudiar y convertirse en profesionales” expresó Bogantes.
Bogantes añadió que, en su caso personal, la Universidad de Costa Rica se convirtió en un motor de movilidad social en su familia, ya que él y sus ocho hermanos lograron estudiar gracias al sistema de becas de la institución.
“Somos nueve hermanos, y todos tuvimos la oportunidad, a través de la Universidad, de desarrollarnos intelectualmente y de encontrar un medio de salir adelante, de tener como dice mi papá un machetito, y sobre todo de servir a la sociedad y de retribuir ese esfuerzo que el estado hace para que una persona después de muchos años de estudio pueda servir a sus semejantes en un ámbito profesional. Y yo creo que de todas las transformaciones que puede sufrir una persona a lo largo de la vida, la transformación que lo lleva a una competencia alta de servicio es la más noble y yo siento que mi familia, con mis hermanos, justamente esa transformación fue favorecida y aportada por la Universidad de Costa Rica” aseguró Bogantes.
El Programa de Residencias Estudiantiles de la Sede Rodrigo Facio inició en el año 1977, cuando la Universidad de Costa Rica acogió una iniciativa estudiantil para dar apoyo de alojamiento a un grupo de 11 personas estudiantes de la provincia de Limón que cursaban estudios en esta sede. En ese entonces la Oficina de Bienestar Estudiantil optó por alquilar una casa para brindar el servicio.
La iniciativa fue tan exitosa, que el número de estudiantes que alquilaban casas en conjunto creció significativamente, por lo que para 1978, la Vicerrectoría de Vida Estudiantil destinó partidas específicas para la compra de mobiliario para esas casas. Un año después, en 1979, la cobertura del programa alcanzó a un total de 267 personas estudiantes.
Para 1984, la Sede Rodrigo Facio adquirió por primera vez un edificio de 28 apartamentos denominado Residencias Estudiantiles. Y a partir del 2002, este beneficio estudiantil impacta a un promedio de entre 700 y 800 personas estudiantes, cada año.
Según la Dra. María José Cascante Matamoros Vicerrectora de Vida Estudiantil, el Programa de Residencias Estudiantil, es una de las herramientas de acompañamiento a la población estudiantil más robustas de la UCR, en aras de la permanencia y graduación de las personas estudiantes.
“La Universidad de Costa Rica desde sus inicios, se ha enfocado en premiar el esfuerzo y la excelencia de las personas estudiantes, por medio de herramientas de apoyo para el éxito académico, en este caso la efectividad del Programa de Residencias no solo ha beneficiado a las personas estudiantes sino también a sus familias, y es así como a la hora de reflexionar sobre el impacto de este beneficio, se debe reconocer que existen a lo largo y ancho de este país, miles de familias que han sido transformadas, gracias a la Educación Pública, desde su fin de ser un motor de movilidad social en este país” afirmó Cascante.
Por su parte, la Licda. Wendy Páez, Jefa de la Oficina de Becas y Atención Socioeconómica manifestó que el Programa de Residencias Estudiantiles es un espacio para la formación integral de las personas estudiantes que viven en zonas alejadas al centro de estudio.
“El beneficio de residencias es uno de los más integrales que ofrece el sistema de becas, no solo es alojamiento cerca de los campus universitarios, sino es un espacio adecuado para el desarrollo de la actividad académica, donde la persona estudiante puede prepararse la alimentación requeridas ya que se cuenta con toda la infraestructura necesaria para este fin, donde lavar su ropa, además cuenta espacios para el estudio, acceso a internet y la interacción social. Otra fortaleza de este beneficio es el acompañamiento de los diferentes profesionales a cargo de estos espacios. Además, la persona residente desarrolla una serie de habilidades para la vida, que son un complemento a la formación académica que brinda la Universidad. Desde la organización interna, la convivencia con otras personas estudiante que pueden tener mucho en común, pero cada una o cada uno con una historia de vida que hace que sus costumbres sean diferentes, hacen que las residencias se conviertan en un aprendizaje de vida valioso” manifestó Páez.
El Programa de Residencias Estudiantiles es un beneficio complementario estipulado en el Reglamento de Adjudicación de Becas a la Población Estudiantil. El programa es administrado por la Oficina de Becas y Atención Socioeconómica (OBAS) en la Sede Rodrigo Facio, y por la Coordinación de Vida Estudiantil en las Sedes Regionales.
Las Residencias Estudiantiles son un espacio físico en donde la población residente se aloja durante el año lectivo para llevar a cabo su plan académico.
Este 2022, el Programa de Residencias Estudiantil de la Sede Rodrigo Facio celebra su 45 aniversario de creación, durante todo este período ha apoyado a miles de estudiantes a concretar su proyecto académico con éxito.
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