En la prevención de la violencia hacia las mujeres, el desarrollo y promoción de masculinidades positivas especialmente en la etapa escolar tiene un papel fundamental, según se desprende de la Política Nacional para la Atención y Prevención de la Violencia contra las Mujeres de Todas las Edades (PLANOVI) y de la Política Nacional para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres 2018-2030 (PIEG), ambas del Instituto Nacional de las Mujeres (INAMU).
En abril de 2020, en el inicio del confinamiento producido por la pandemia por COVID-19, las consultas por violencia intrafamiliar y sexual recibidas en la línea 911, llegaron a 981 en comparación con las 827 como promedio entre enero y marzo del mismo año, según datos del (INAMU).
Desde el año 2015, la Vicerrectoría de Acción Social de la Universidad de Costa Rica (UCR), desarrolla el proyecto TC-630 "Prevención de la violencia y promoción de una cultura de paz con enfoque de masculinidad en niñas, niños y adolescentes en los cantones de Curridabat y Montes de Oca".
Este proyecto consiste en la utilización de técnicas lúdicas dirigidas a personas menores de edad en primaria y secundaria, para guiarlas en un proceso de revisión de la socialización en relación a roles de género, que ayuden a la prevención de la violencia, según el psicólogo Ruthman Moreira Chavarría, coordinador del proyecto.
El proyecto se desarrolla en la Escuela 15 de Agosto en Curridabat, y en Montes de Oca en las escuelas Betania, Inglaterra y Dante Alighiery. Se estima que alrededor de unas 300 personas menores de edad han participado en los talleres y actividades.
Además de la alianza con escuelas en Montes de Oca, Tirrases de Curridabat y los Consejos Participativos de la Niñez y la Adolescencia (Granadilla y Tirrases), posteriormente se fueron sumando otras alianzas con el Programa Puente al Desarrollo del IMAS para el cantón, la Red Local de Prevención de la Violencia y la Promoción de la Salud, así como la Oficina de Equidad e Igualdad de Género de la Municipalidad de Curridabat y la Red de Masculinidades del Ministerio de Educación Pública.
Al ser un trabajo comunal universitario (TCU), se cuenta con la participación de estudiantes de diferentes carreras como Psicología, Educación, Derecho, Trabajo Social, Orientación y Comunicación, los cuales reciben capacitación sobre los diferentes temas que abordan los talleres.
Para la estudiante de Psicología Mariana Peralta, este TCU en particular le permitió crecer personal y profesionalmente “especialmente a través del trabajo multidisciplinario, además de tener diferentes perspectivas y profundizar en diferentes áreas de interés”.Entre las temáticas abordadas con la población menor de edad se encuentran: niñas, niños y adolescentes como sujetos de derecho; socialización de masculinidades y feminidades, cultura de paz; prevención de distintas formas de violencia; manejo asertivo de emociones y conflictos y prevención del bullying y ciberbullying.
Nicole Navarro, estudiante de Educación matriculada en este TCU, indicó que el proyecto le permitió aplicar los conocimientos teóricos en el manejo de grupos y trabajo con niños y niñas. Para ella, en la construcción de una sociedad sin violencia “los niños y niñas tienen mucho para ofrecer”. Dentro de los logros más relevantes de este proyecto, el coordinador Moreira, detalla una disminución en la apertura de expedientes disciplinarios por expresiones de violencia en los centros educativos en los que se lleva acabo.
Según las Naciones Unidas, la violencia contra las mujeres y las niñas es una de las violaciones de los derechos humanos más “extendidas, persistentes y devastadoras del mundo actual sobre las que apenas se informa debido a la impunidad de la cual disfrutan los perpetradores, y el silencio, la estigmatización y la vergüenza que sufren las víctimas”. Se estima que una de cada tres mujeres se ve afectada por algún tipo de violencia de género y cada 11 minutos una mujer o niña muere asesinada por un familiar.