El objetivo de este curso es que utilicen todos los conocimientos adquiridos durante la carrera para concretar de manera exitosa un proyecto agrícola en diferentes sistemas de producción. Este año, debido a la pandemia del COVID-19, los docentes de la Escuela de Agronomía decidieron invertir recursos, tiempo y mucho trabajo para hacer de este curso una experiencia totalmente diferente, y dar el salto hacia el futuro con la Agricultura 4.0.
"Básicamente lo que hemos hecho en este curso es adquirir e incorporar tecnología para que los estudiantes se familiaricen con este tipo de equipos y se apoyen para la toma de decisiones con información en tiempo real sobre el comportamiento de los cultivos", detalló el profesor Guillermo Vargas, coordinador del curso.
Para ello, previamente los docentes con ayuda de los trabajadores de la Estación, instalaron dos tecnologías desarrolladas en Israel: CropX y Netbeat, las cuales permiten que los estudiantes puedan recibir información sobre el cultivo en tiempo real desde cualquier dispositivo con Internet.
El sistema CropX incluye sensores ubicados a 20 cm y 46 cm de profundidad en las parcelas. Estos recopilan información sobre la humedad del suelo, la temperatura y la conductividad eléctrica, que es una forma de medir fertilizantes.
Los sensores envían señales a la unidad terminal remota (Antena RTU) y de allí se envían los datos al "cerebro" MCU, el cual está conectado a Internet y sube los datos de forma continua a la red. Además, el sistema recibe imágenes de un satélite que pasa cada 8 o 15 días por la Estación y toma fotografías de las parcelas.
A través de la plataforma Netbeat, el estudiantado puede acceder a toda esta información y desde allí pueden programar y activar el sistema de riego y nutrición usando cualquier teléfono celular, ya que las parcelas e invernaderos dedicados a docencia cuentan con sistemas de riego automatizados.
El profesor Carlos Huertas Blanco explica que los sensores, equipos, algoritmos y software que se han instalado ayudan a recibir e interpretar la información de forma más rápida y precisa en relación de 1 o hasta 100 datos por micro segundo, por lo que ahora pueden ver datos que los agrónomos antes no podían ver.
Estas tecnologías, además se combinan con otras herramientas para la docencia como Zoom y la plataforma de Mediación Virtual (Metics) que funciona para compartir y enlazar información que se recopila en el campo, así como para enviar sus informes y realizar las discusiones de grupo para enriquecer el aprendizaje, según agregó el profesor Vargas.
Además, señaló que el objetivo de todo este esfuerzo es que los futuros agrónomos puedan adquirir experiencia y habilidades para cuando estén en el ejercicio profesional y tengan que enfrentarse a las necesidades del mercado y una de ellas es la industria 4.0.
“Es muy probable que en un futuro los estudiantes de Agronomía que se están preparando bajo esta tecnología lleguen a ser grandes investigadores y desarrolladores”, señala el profesor Huertas.
A pesar de los grandes avances tecnológicos, los estudiantes requieren del apoyo de los docentes, los trabajadores de la Estación y dos estudiantes asistentes que están en el campo. Mediante videollamadas, fotos y videos ellos les transmiten información valiosa que sólo puede captarse por medio de los sentidos.
En uno de los invernaderos el profesor Gerardo Chacón Naranjo se encarga de hacer calibraciones para aplicar abono orgánico en una de las camas de cultivo que tienen los estudiantes. "Ellos estaban ahorita en línea e hicimos algunos ajustes gracias a que se les pudo enseñar en vivo como estaba quedando la aplicación" detalla el docente.
Mientras tanto, la asistente Priscilla Murillo prepara los almácigos. “Mi papel es evaluar los cultivos, así que durante todo el proceso voy a estar tomando datos de fenología y plagas, ayudándoles para preparar los almácigos antes de llevarlos al campo. Como yo vengo al campo y veo todo esto les ayudo a resolver esos problemas” comenta la joven.
Este equipo de apoyo además se encarga de llevar acabo en el campo las decisiones que toman los estudiantes; como la aplicación de abono orgánico, aplicación de herbicidas, y otras acciones para el control de malezas y plagas que deben realizarse directamente en el cultivo.
El equipo completo lo conforman los profesores: Carlos Huertas Blanco, Guillermo Vargas Hernández y Gerardo Chacón Naranjo; los asistentes estudiantes: Priscilla Murillo Solano, Yuri De Capua Fallas y Antony Bermúdez Morales; y los colaboradores de campo: Milton Matute Silva y Iván Alberto Molina Cruz.
El Dr. Luis Gómez Alpízar, director de la Escuela de Agronomía explicó que en este caso la compra de los equipos se realizó con recursos del Fondo de Desarrollo Institucional. La inversión fue de 7 millones de colones, a lo que se suma el aporte en mano de obra de los trabajadores de la estación para la apertura de zanjas, la colocación de tuberías y otros trabajos.
Gracias a esta iniciativa docente, la Estación Experimental Agrícola Fabio Baudrit Moreno hoy es una estación totalmente interconectada. Esto beneficiará a estudiantes de futuros cursos y al desarrollo de proyectos de investigación en esta línea, pero además significa un cambio hacia una nueva forma de hacer agricultura utilizando la tecnología de punta como aliada.