Ni la llegada de una pandemia ha detenido a un grupo de personas que decidieron salir adelante y terminar sus estudios de secundaria con el apoyo del Proyecto de Educación Abierta (PEA) de la Sede del Sur de la Universidad de Costa Rica y el Ministerio de Educación Pública (MEP).
Odalys Angulo Santamaría es una de ellas. La joven de 31 años y vecina de Golfito tiene una meta clara: conseguir un empleo en la Fuerza Pública con el cual pueda darle una mejor calidad de vida a sus dos hijos. Para lograrlo, decidió retomar sus estudios en el PEA, un programa flexible que le permite estudiar sin dejar por mucho tiempo a sus niños.
Este proyecto que inició en el 2018 tiene por objetivo preparar para las pruebas que aplica el MEP, a personas adultas como Odalys que no han podido concluir sus estudios de secundaria. Y aunque la pandemia provocó que las pruebas programadas para marzo quedaran suspendidas por el momento, estudiantes, docentes y administrativos no cesan en su labor.
La docente de la Sede el Sur y coordinadora del proyecto, Heidy Ávalos Fernández, manifestó que se está trabajando de forma remota con diferentes plataformas tecnológicas para abarcar los temas y se les brinda guía en el uso de las herramientas tecnológicas. Además, se está entregando material didáctico impreso para aquellas personas que no tienen acceso a Internet. “Esperamos que al finalizar este segundo ciclo 45 personas que están pendientes de realizar las pruebas puedan hacerlo” acotó.
Más de 300 personas desde los 18 años hasta los 60 años, de comunidades como Golfito, Corredores, Paso Canoas, Ciudad Cortés y el territorio indígena de Alto Comte se han visto beneficiadas por este programa. En sus dos años de funcionamiento, el PEA contabiliza más de 100 pruebas de sétimo, octavo, noveno y quinto año aprobadas ante el MEP.
La mayoría de sus estudiantes son mujeres, madres solteras y de bajos recursos, pero también hay hombres. Según detalló la coordinadora, para estas personas no contar con el noveno año se convierte en una limitante para conseguir empleo y mejorar su calidad de vida y la de sus hijos. De ahí la importancia de obtener su título de noveno año y de Bachillerato.
Este proyecto le permite a la Universidad dar un apoyo a la comunidad donde se encuentra ubicada, ya que a partir de la aprobación de sus estudios secundarios, las personas tienen la posibilidad de seguir estudiando en la Universidad o en otras instituciones como el INA o bien mejorar sus condiciones laborales. Así lo señaló la docente Heidy Ávalos: “Golfito es una comunidad costera que tiene amplias necesidades a nivel de educación y a nivel económico y con este proyecto buscamos apoyar en ambas”.
Ávalos explicó que el PEA de la Universidad de Costa Rica, presente en la Sede del Sur, la Sede del Pacífico y la Sede Rodrigo Facio, es el único modelo de educación abierta que tiene dividida su ejecución en dos semestres. Además, se diferencia por ofrecer a las personas matriculadas apoyo por parte de docentes y estudiantes universitarios, quienes a través de Trabajo Comunal Universitario imparten talleres de matemática y redacción.
En este programa interinstitucional la UCR aporta la plataforma administrativa y física que permite que el proceso educativo se lleve a cabo, mientras que el MEP aporta los docentes de las materias básicas: Inglés, Matemática Estudios Sociales, Biología o Ciencias, Formación Cívica y Español.