Diez años de un jardín japonés en Costa Rica

El jardín japonés del Jardín Botánico Lankester, de la UCR, se construyó hace una década con la cooperación del Gobierno de Japón. Foto: archivo ODI.

La idea de construir un jardín japonés nació a principios del 2007, producto de la necesidad de darle un valor paisajístico a la colección de bambués del JBL, pues por casi 20 años había crecido de forma vigorosa y poco ordenada.

También surgió por el requerimiento de construir una edificación que le permitiera al JBL organizar actividades culturales y de educación ambiental.

Con ese objetivo se contactó a la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA, por sus siglas en inglés) para explorar la posibilidad de traer al país un cooperante que ayudara a la UCR a elaborar un anteproyecto para la construcción de un jardín japonés. Como una coincidencia extraordinaria, la JICA respondió que precisamente en ese momento se encontraban en el país dos jóvenes cooperantes que estaban realizando una propuesta para la construcción de un jardín etnobotánico.

Como resultado de una breve negociación, ambos cooperantes se trasladaron al JBL y después de una semana de intenso trabajo nació la propuesta conceptual para la construcción del jardín japonés. Uno de los cooperantes, el paisajista Hiroshi Oozeki, continuó trabajando por casi un año durante sus fines de semana en la elaboración del anteproyecto.

Con este documento, el JBL presentó al Gobierno de Japón una solicitud para financiar la edificación de la obra y finalmente en diciembre del 2007 se recibió la ayuda económica de la Embajada de Japón, a la cual se sumó una contrapartida de la UCR.

A pesar de su aparente sencillez, un jardín japonés está lleno de detalles y para su construcción se deben respetar una serie de antiguas reglas y principios paisajísticos de la jardinería de ese país asiático.

El diseño del jardín japonés contempla dos viviendas tradicionales de la cultura de Japón, que fueron construidas conforme a las técnicas que se aplican en Japón. Foto: archivo ODI.

Por esta razón, nuevamente se solicitó la cooperación de la JICA y el JBL recibió al maestro paisajista Mamoru Tsunoda, quien realizó mejoras a la propuesta original y supervisó todos los detalles de la construcción del jardín japonés.

El proyecto resultó ser una obra compleja que incluyó la construcción de un lago y de tres cabañas, una de las cuales se utiliza como aula para actividades de educación ambiental y como espacio para diversas manifestaciones culturales y artísticas, como exposiciones de bonsai.

El jardín japonés es la suma de elementos propios de la naturaleza y de los jardines japoneses donde las piedras, cascadas, lagos y puentes, así como plantas acuáticas, musgos y helechos, tienen un propósito y un sentido.

Es además un espacio propicio para la contemplación y el disfrute de la naturaleza y para que los costarricenses y extranjeros lo disfruten cualquier día del año.

Felicitación

La Oficina de Costa Rica de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) quiere felicitar al Jardín Botánico Lankester de la Universidad de Costa Rica por el décimo aniversario de la inauguración de su jardín japonés.

En la JICA nos sentimos muy orgullosos de haber apoyado la construcción de este hermoso jardín japonés con el trabajo de dos cooperantes japoneses jóvenes, quienes elaboraron el anteproyecto y los planos constructivos, y con la labor realizada por el cooperante experto en paisajimo que supervisó la construcción de esta compleja obra. Sentimos mucha admiración por los esfuerzos que cada día efectúa el personal del Lankester para mantener el jardín japonés en óptimas condiciones.

Como japoneses conocemos bien que para cuidar un jardín japonés se requiere conocimiento y mucho cariño. Esperamos que este bello jardín japonés comparta su serenidad y tranquilidad con el pueblo costarricense por muchos años.

OMEDETOU GOZAIMASU!