Sin embargo, fue hasta el 3 de diciembre de 1979 cuando se fundó el Centro de Investigaciones Históricas (CIH) de la UCR. Este 2019, con un nombre diferente pero con la misma ambición, el Centro de Investigaciones Históricas de América Central (Cihac) celebra su 40 aniversario.
Así lo mencionó el actual director del Cihac, David Díaz Arias, quién recalcó la importancia de crear el centro en una época donde abundaban conflictos en diferentes países centroamericanos.
“Era un contexto de mucha actividad intelectual centroamericana en Costa Rica, había guerra en Centroamérica y muchas personas intelectuales estaban exiliadas en el país”, acotó el director.
En 1994, el Centro decidió enfatizar sus estudios en América Central, pues este espacio se había constituido como un actor vital en la formación de investigadores en la región.
En este mismo periodo, el Cihac articuló sus intereses intelectuales con el ya existente Posgrado Centroamericano en Historia y, como resultado, se convirtió en formador de investigadores para países como Nicaragua, Salvador, Honduras, Panamá y Guatemala.
“Gracias a esta formación en Nicaragua se refundó el Instituto de Historia de Nicaragua y Centroamérica; además, en El Salvador se abrió una Licenciatura en Historia, todo esto con la colaboración de gente formada en el Cihac”, recalcó Arias.
La investigadora nicaragüense Margarita Vannini vivió de cerca la influencia del Cihac en Centroamérica, pues a inicios del año 1990, cuando fungía como directora general del Instituto de Historia de Nicaragua y Centroamérica (IHNCA), se acercó al Centro con el objetivo de solicitar colaboración.
“Yo le dije a los representantes del Cihac que en Nicaragua necesitábamos ayuda, necesitábamos reconectarnos con el mundo, necesitábamos formar historiadores, porque en los ochenta nosotros teníamos muy poca circulación de bibliografía y circulaban muy pocos académicos. Necesitábamos actualizarnos”, recalcó Vannini.
Producto de este primer acercamiento, se fortalecieron las alianzas de apoyo entre ambos centros de investigación. Por esto, se creó una red de colaboración, intercambio y apoyo en la que el Cihac fue el núcleo.
“Encontramos una enorme receptividad en el Cihac y en la UCR, impartían cursos de viernes a domingo para que los investigadores nicaragüenses pudieran ir a estos cada 15 días. Con una enorme generosidad, una extraordinaria buena voluntad y un gran empeño por construir, se dio este proceso de formación de personal con el apoyo del Cihac”, resaltó Vannini.
Desde ese momento hasta el 2017, Vannini fue directora del IHNCA y, por eso, subraya la importancia del apoyo del Cihac y del Programa de Posgrado Centroamericano en Historia en una época convulsa y de cambios en el contexto nicaragüense.
“Para mí, el paso por el Cihac marcó un momento de cambio. Yo asumí la dirección del IHNCA y, en ese proceso, el acompañamiento de los profesores de la UCR fue fundamental. Yo participé en el programa de maestrías del Cihac, es decir, también mi proceso de actualización se dio en ese momento, mientras dirigía el instituto”, acotó la investigadora.
La colaboración entre el Programa de Posgrado Centroamericano en Historia y el Cihac ha estado presente desde sus inicios, pues el primero fue fundado tan solo un año antes del Centro, en 1978. Esto constituía un “proceso de institucionalización de la disciplina histórica”, de acuerdo con Anthony Goebel, actual director del Posgrado.
Goebel aseguró que el Cihac ha sido vital para el desarrollo de investigaciones en el Posgrado, pues es desde este centro que se generan los ejes y tendencias sobre los cuales el estudiantado del posgrado decide trabajar.
El académico recalcó que la relación entre ambas instancias ha sido de un beneficio mutuo, ya que las investigaciones desarrolladas en el posgrado alimentan el conocimiento generado en el Cihac.
“Las investigaciones del Cihac son sumamente valiosas para la docencia y el posgrado, pero a la vez, las tesis de maestría o doctorado que se desarrollan en el Posgrado alimentan la investigación del Cihac y la docencia universitaria”, expuso el director.
El director resaltó la importancia de las oportunidades que el Centro genera, pues sus vínculos internacionales dan la posibilidad de que alumnos de historia obtengan becas de estudios o asistencia a congresos.
“Vivimos en un mundo donde las redes de colaboración son vitales y, por supuesto, el Cihac es un nodo importantísimo para favorecer el intercambio académico y de estudiantes”, subrayó.
Goebel aseguró que desde su perspectiva, el Cihac ha sido “un imán” que ha atraído investigadores de todas partes del mundo. Esto significa una clara contribución al desarrollo académico de la disciplina histórica en la región centroamericana.
Desde su transformación en 1994, el Cihac ha dado un valor primordial a la realización de estudios desde una perspectiva más amplia, esto con el objetivo de que los investigadores e investigadoras no limiten su mirada a las fronteras costarricenses.
“No queremos que el nacionalismo sea una camisa de fuerza”, aseguró el director Díaz.
Con el objetivo de ampliar esta perspectiva, el Cihac ha buscado consolidar nuevas alianzas de investigación como lo es el Centro de Estudios Latinoamericanos Avanzados en Humanidades y Ciencias Sociales (Calas), impulsado por la República de Alemania.
Según el coordinador de Calas en Costa Rica, Werner Mackenbach, los intercambios culturales y los acuerdos de colaboración con organismos internacionales han sido claves para continuar trabajando a partir de esta perspectiva.
“Hemos recibido estudiantes centroamericanos que se han formado acá y después regresaron a sus países donde juegan un papel importante. Además, desde la cooperación internacional también hemos obtenido colaboración por parte de gobiernos. Todo esto ha contribuido la regionalización del Cihac”, afirma Mackenbach.
Mackenbach subrayó que es imposible estudiar fenómenos regionales desde una perspectiva nacionalista y sesgada. Por tanto, estos intercambios enriquecen y amplían la perspectiva de los investigadores nacionales.
El académico señaló que en el futuro, el Cihac deberá proyectarse a la investigación histórica de problemáticas actuales, como por ejemplo las problemáticas socioambientales relacionadas con la atención del cambio climático, el cual toma cada vez una mayor importancia.
“Debemos apuntar a la investigación histórica de problemáticas más recientes, esto sin dejar de lado la historia política y la historia económica como lo venimos haciendo”, concluyó Mackenbach.