Durante el pasado mes de septiembre las instalaciones del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), ubicadas en Coronado, albergaron el Latinity 2019, en el que participó un grupo de mujeres indígenas compuesto por (en orden usual) Sandra Isabel, Ileana Moya, Juana Sánchez y Marbelly Vargas. Foto Laura Rodríguez.
Los aportes y nuevos proyectos de investigación científica que realizan las mujeres e inclusive el análisis del impacto que tiene la tecnología en las culturas indígenas, forman parte de los propósitos por los que se organizó en Costa Rica el Latinity 2019, como fruto de un esfuerzo en conjunto entre la comunidad Latinas in Computing y la Cooperativa Sulá Batsú, con el apoyo de la Universidad de Costa Rica (UCR), el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT) y el Instituto Nacional de la Mujer (INAMU).
Mediante charlas, talleres, exposiciones y conferencias, las participantes intercambiaron conocimientos y experiencias sobre la tecnología aplicada en diferentes campos, como por ejemplo en salud, computación e informática, educación, medio ambiente, mercadeo, robótica, arte digital, derechos humanos en el mundo digital, la brecha de género, investigación en Internet y la tecnología como herramienta de desarrollo.
“La Cooperativa Sulá Batsú se postuló como organizadora de esta cuarta edición del Latinity en Costa Rica, en conjunto con 25 entidades público-privadas en donde sobresale la UCR. Se trata de la conferencia más grande para mujeres en cuanto a temas de tecnología de toda Latinoamérica, su objetivo es exponer la producción y las reflexiones sobre tecnología con enfoque de género y en los que el papel de las mujeres es central”, indicó Kemly Camacho Jiménez, coordinadora general de Sulá Batsú.
La cooperativa Sulá Batsú tiene 15 años de existencia, es multidisciplinaria, de trabajo asociado y, según explicó Camacho, nació para poder ofrecerle oportunidades laborales a jóvenes universitarios egresados de las ciencias sociales e interesados en la tecnología; asimismo, trabajan en concretar procesos de apropiación tecnológica por parte de las comunidades, mezclando las ciencias sociales con la informática, la computación y las ingenierías.
Al Latinity Costa Rica asistieron 550 personas y 140 conferencistas, se programaron más de 90 actividades en paralelo todas hechas por mujeres, “además de los temas mencionados se incluyó un apartado al que le dimos especial interés, que se refiere a cómo las comunidades de mujeres negras e indígenas contribuyen a la construcción del conocimiento en la sociedad digital actual”, aseveró Camacho.
Ante esto, al Latinity 2019 asistió un grupo de mujeres indígenas de Talamanca, entre ellas Marbelly Vargas Urbina, indígena cabécar y administradora del Centro Intercultural de la UNED en Talamanca; ella expresó que las mujeres indígenas no están acostumbradas a asistir a este tipo de actividades sobre tecnología, pues no las tienen tampoco en sus comunidades.
“La propuesta de las organizadoras es que expusiéramos sobre nuestro conocimiento ancestral, el de las mujeres indígenas y cómo podemos conectar el mundo tecnológico con el nuestro, vinimos a compartir el conocimiento que nuestras abuelas nos heredaron”, afirmó Vargas.
Esta representante indígena destacó que desde la UNED están convencidos de que se puede entrar a los territorios indígenas con la meta de dar a conocer las aplicaciones tecnológicas, “siempre y cuando se respete la cultura local, que no se destruya el buen vivir indígena; los indígenas vemos la tecnología como un aliado, pero que no nos haga desnaturalizarnos de quienes somos. Para que la gente conozca nuestra cultura, que merece ser respetada, aprendemos sobre el conocimiento tecnológico que es muy útil y una herramienta exitosa, para a través de ella exponerla, pero que no nos reemplace como seres humanos, que nos ayude pero que no nos destruya”, enfatizó Vargas.
Por su parte Ileana Moya Obando, indígena cabécar y traductora auxiliar del Poder Judicial, agregó que planean identificar alguna herramienta tecnológica, como puede ser una página Web o la realidad virtual, para que les ayude a proyectar cosas que las personas puedan ver y así conocer sobre la cultura indígena costarricense.
“Nos preguntamos cómo explicarle al mundo el significado de nuestra cultura, para que se siga conservando y no se destruya, y para que las instituciones encargadas de la educación no traten de enseñarnos cosas que no requerimos; queremos proteger nuestra cultura y nuestro idioma”, recalcó Moya.
Uno de los proyectos de investigación que destacaron dentro del Latinity 2019 fue el que desarrolló Ana Brenes Vindas, estudiante de la Maestría Profesional en Computación e Informática de la UCR; precisamente, su proyecto de graduación es un diseño y validación de un prototipo basado en realidad virtual que mejora el proceso de recolección de datos que se realiza en un estudio de mercado, como por ejemplo sobre diseños de empaques para productos comestibles.
“El objetivo principal era diseñar y evaluar este prototipo que lo que hace es permitir a la persona observar e interactuar con un producto en específico de manera virtual, para que su percepción sobre las características del objeto de estudio sea más realista”, indicó Brenes.
Brenes agregó que este tipo de actividades como el Latinity todavía son necesarios para difundir el papel primordial que realizan las mujeres en el desarrollo de la investigación en ciencia y tecnología, pero que lo ideal en un futuro no muy lejano es que no exista distinción y que en estos eventos participen tanto mujeres como hombres.
“Estos espacios empoderan muchísimo a las mujeres y queda de manifiesto que hay oportunidades para todas y todos de progresar; me gustaría que el día de mañana no hubiese distinción, pero por el momento sí es importante que hoy acá sea sólo para mujeres para que participen desde niñas hasta jóvenes y mujeres adultas y así reconozcan su propio potencial”, concluyó Brenes.