La Universidad de Costa Rica (UCR) creó en 1942 el Laboratorio Carlos Humberto Aguilar Piedra, un espacio de la Escuela de Antropología (EAT) dedicado a la investigación y preservación del patrimonio arqueológico nacional.
El Laboratorio es un muestrario arqueológico, en el cual, se utilizan herramientas tecnológicas para analizar colecciones de muestras orgánicas como semillas, tierra, carbón, así como colecciones de cerámica y piedra considerados “materiales artefactuales”.
La información recapitulada permite a los investigadores y estudiantes adentrarse en el pasado de nuestro territorio para entender el comportamiento de las poblaciones antiguas tras conocer la vegetación que existía en los sitios arqueológicos analizados.
La coordinadora del Laboratorio, M. Sc. Floria Arrea, junto con la curadora de los materiales, Dr. Carolina Cavallini, trabajan para proporcionar un servicio de acompañamiento y trabajo colectivo ya sea en los cursos prácticos de los estudiantes de la carrera o en apoyo a los investigaciones.
Pero más allá del trabajo que se desarrolla en las instalaciones del Laboratorio, ubicado en la Facultad de Ciencias Sociales de la UCR, la iniciativa colabora con proyectos en diversas comunidades del país en una relación constante con las personas de la localidad.
Actualmente, el Laboratorio forma parte de tres proyectos de investigación en las regiones de Corinto, Barranca y Guayabo, donde realizan análisis antropológicos a fin de profundizar el conocimiento que existe sobre la localidad y así, poder transmitirlo a sus pobladores.
“El Laboratorio siempre va a tener esa función tanto docente como de investigación y también de acción social porque es importante que lo que hacemos se comunique a las comunidades para que estas se apropien de lo que les pertenece (su pasado)” aseveró la Arrea.
En el contexto actual, el trabajo del Laboratorio asume un papel de salvaguardar el patrimonio cultural ante el incremento del desarrollo inmobiliario e industrial que ha puesto en peligro zonas ricas en contenido antropológico.
Como laboratorio, la principal función que realiza es la investigación arqueológica. Proyectos realizados cubren el pasado precolombino de Costa Rica en regiones como Irazú, Turrialba, Pavas, Curridabat, Palo Verde, San Ramón, San Vito, y Coto Brus. Los resultados de los proyectos de investigación y de los análisis que se practican se mantienen en bases de datos actualizadas con el fin de que puedan ser consultadas por estudiantes e investigadores.
Además, esta el manejo de las diferentes colecciones que posee el Laboratorio, estas son:
· Colección de Cerámica Indígena o Ceramoteca.
· Litoteca o colección de artefactos precolombinos elaborados en piedra.
· Colección de artefactos especiales en jade, cerámica, vidrio, metales y otros.
· Colección de muestras de tierra colectadas en diversas investigaciones arqueológicas para análisis de polen, fitolitos, análisis químicos etc.
· Colección de referencia de plantas frescas conservadas en formalina.
· Colección de semillas autóctonas carbonizadas, material de referencia
· Colección de semillas arqueológicas carbonizadas.
· Colección de huesos humanos procedentes excavaciones arqueológicas.
· Colección de huesos animales y de moluscos procedentes de las distintas investigaciones.
· Colección de fotografías y diapositivas de sitios arqueológicos.
· Colección de planos de sitios arqueológicos.
Información documental sobre más de 500 sitios arqueológicos registrados por el Laboratorio de Arqueología, se tienen diarios de campo e informes de campo y análisis de laboratorio.
Centro de documentación con textos de Arqueología, Antropología, revistas especializadas y tesis de Licenciatura en Antropología con énfasis en Arqueología.