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La terciopelo

La terciopelo, o barba amarilla, es la serpiente que causa más accidentes en el país, ¿pero por qué ocurre esto?, ¿qué conoce usted sobre dicho animal?
4 abr 2018Ciencia y Tecnología
Terciopelo
La terciopelo acostumbra a esconderse durante el día entre las raíces de los árboles o entre la hojarasca, por lo que pisarlas es la causa de la mayoría de accidentes.  Karla Richmond

Costa Rica cuenta con una gran variedad de serpientes, alrededor de 140 especies. Sin embargo, de esas solo 23 son venenosas; entre ellas se encuentra la terciopelo (Bothrops asper), que es la mayor causante de los accidentes ofídicos en la región centroamericana (más del 50%).

La terciopelo posee una cabeza bien diferenciada y de forma triangular, su color de fondo puede ser gris oscuro, verdoso o café; además, posee un patrón dorsal que lo distingue de otras especies, el cual consiste en una serie de triángulos a ambos lados del cuerpo.

Aunque la terciopelo es la serpiente más conocida en el país por su letal veneno, muchas personas la confunden con otras especies o cambian su nombre. Esta especie se distingue por que al nacer las hembras tienen la cola amarilla, no obstante, cuando crecen mudan de piel y pierden esa característica, por lo que las personas las confunden con otras serpientes.

“A la terciopelo se le conoce popularmente con un sinfín de nombres, que pueden variar dependiendo del lugar donde estemos. Algunos le dicen cola amarilla, barba amarilla o las confunden con las tobobas”, explicó Fabián Bonilla Murillo, herpetólogo del Instituto Clodomiro Picado (ICP) de la Universidad de Costa Rica (UCR).

Las hembras suelen ser de mayor tamaño que los machos, pueden alcanzar un máximo de dos metros y medio de longitud, mientras que el macho mide alrededor de 130 centímetros. Sin embargo, no es común observar ejemplares que superen los dos metros “porque las matan antes de que lleguen a esos tamaños”, añadió Bonilla.

En cuanto a su alimentación, las terciopelo suelen ser “generalistas”, es decir, no se enfocan en una sola presa como lo hacen otras especies. Roedores, anfibios y hasta otras serpientes forman parte de su dieta, lo que les permite sobrevivir de forma fácil en comparación con otras, además de adaptarse a zonas alteradas.

“Se han adaptado bien a zonas como pastizales o campos de cultivo, lo que quiere decir que tienen más probabilidades de encuentro con las personas”, dijo el herpetólogo.

Aunque las terciopelo son muy fecundas y pueden llegar a tener hasta 90 crías, lo cierto es que no todas sobreviven y solo una pequeña cantidad logra llegar al estado adulto y reproductivo.

“Mucha gente piensa que cada vez hay más terciopelos, pero en realidad hay factores que influyen, como la época del año; además, hay más gente que hace 30 o 40 años y cada vez la frontera agrícola se estrecha más, lo que aumenta las probabilidades de encuentro con estos animales”, explicó Bonilla.

Aunado a lo anterior, por sus colores, este reptil se camufla muy bien en el campo y aunque se acostumbra a imaginar a las serpientes enrolladas a las ramas de los árboles, esta especie raramente sube a los arbustos. “Es un animal casi que 100 % terrestre”, explicó el experto.

Terciopelo
La terciopelo posee una cabeza bien diferenciada y de forma triangular, su color de fondo varía entre gris oscuro, verdoso o café y tiene a ambos lados del cuerpo una serie de triángulos.  Karla Richmond

Comúnmente las terciopelo se esconden durante el día entre las raíces de los árboles o entre la hojarasca del bosque, por lo que pisarlas es la causa de gran parte de los ataques, ya que la serpiente busca su defensa.

“El animal responde a un estímulo igual que cualquier otro animal, lo que sí pasa es que son más nerviosos, van a defenderse con menor grado de provocación que otros animales”, aclaró Bonilla.

¿Qué hacer?

Los bosques húmedos son el hábitat más común de las terciopelo y se encuentran en ambas vertientes del país. Además, se caracterizan por ser nocturnas, razón por la que observarlas es aún más difícil y las personas las pisan de forma accidental.

Las mordeduras de serpientes se dan por un acto de defensa de estos animales cuando se sienten amenazados y pisarlos es el accidente más común, por lo que los pies y las piernas son las zonas del cuerpo humano mayormente afectadas. Es decir, las serpientes, incluida la terciopelo, raramente atacarán si no son molestadas o perturbadas.

Intentar atrapar o matar a las serpientes es uno de los mayores errores, lo más indicado es alejarse. Además, si se encuentran en zonas urbanas o casas de habitación, la medida de prevención es llamar al servicio de emergencias 9-1-1.

Más allá de la peligrosidad, para Bonilla, el conflicto de los humanos con las serpientes puede verse también desde un punto de vista cultural: “siempre ha sido el animal malo, malo en la Biblia también, lleva todo un legado histórico que juega un papel en su conservación o en su no conservación”, concluyó.

 

En esta edición usted puede conocer algunos de los mitos que rodean a las siguientes especies:

Murciélagos

 

El alacrán

Tiburón Martillo

El Cocodrilo

La Tarántula

Paula Umaña González
Periodista, Oficina de Divulgación e Información
paulakwen.umana  @ucrxdcr.ac.cr

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