Universidad de Costa Rica
“La Acción Social (AS) puede incidir en el desarrollo social y económico si consideramos que es una actividad solidaria, y que no parte del asistencialismo, sino de la concertación. En la Universidad de Costa Rica (UCR) creemos que tiene que ser realizada en consonancia con los intereses y aspiraciones de los sectores más vulnerables”, afirmó el rector Henning Jensen Pennington sobre la importancia del Foro de Acción Social: La inter-acción Universidad- Sociedad: propuestas y desafíos a cien años de la Reforma de Córdoba. Este inició en el segundo semestre del año lectivo 2017 con Encuentros comunitarios y de reflexión en las sedes y recintos, y concluirá en abril del 2018.
El rector Jensen remarcó que la UCR desde de su creación ha tenido un fuerte compromiso con la sociedad costarricense. Esto pese a las presiones de sectores economicistas que abogan por un modelo de una universidad más corporativa. En ese sentido, el jerarca comentó que “la AS es absolutamente esencial en la universidad pública, y sobre todo en la latinoamericana. Partiendo del hecho que esta no es solo una institución que siente responsabilidad por su entorno político, social y cultural, sino que además por el cambio. La AS es sustantiva y sustancial, por lo que no puede faltar en la manera en que la UCR se define a sí misma. Esta es una dimensión irrenunciable”, sentenció Jensen.
Por ello, el rector no dudó en señalar que el Foro de Acción Social es una oportunidad para discutir de manera colectiva y someter a un proceso de revisión crítica lo realizado. También, para corregir las debilidades que se hayan consolidado a lo largo del tiempo. En su opinión, los Encuentros comunitarios y de reflexión que se están realizando fortalecerán la AS futura. “La UCR tiene que renovar la forma como concibe la AS, solo por el simple hecho que todo en nuestra universidad tiene que ser revisado y mejorado, en concordancia en los principios establecidos en el Estatuto Orgánico”, explicó Jensen.
El rector Jensen comentó que desde los planteamientos del III Congreso Universitario, fundamental en la conformación de la AS como uno de los pilares del quehacer de la UCR, han surgido distintas formas de vinculación con la sociedad. Desde el Trabajo Comunal, los proyectos de Extensión Docente y Cultural, hasta opciones de vínculo remunerado; pero sin perder la esencia misma de la AS planteada en ese histórico congreso.
Incluso en aquellas opciones que la UCR le brinda a la ciudadanía, y que implican algún tipo de desembolso de parte de las personas que matriculan cursos, capacitaciones y otras modalidades de vinculación externa, el lucro no es el objetivo último. El fin es mejorar la calidad de vida de las personas, transferir conocimientos y, en general, el bien común en Costa Rica, explicó el rector.
“A lo largo del tiempo se han abierto nuevas posiciones, que tienen algún respaldo en legislación nacional y en las propias políticas universitarias. La UCR como toda institución reacciona ante los cambios del país, que en muchos momentos presionan al interno de la vida universitaria; pero no diría que eso haya transformado radicalmente, lo que en un lenguaje ya poco usado llamamos la esencia de la universidad pública”.
De acuerdo con Jensen, en el vínculo Universidad-sociedad sigue latiendo el espíritu solidario que fundamentó el origen de la UCR, enriquecido por los principales postulados de la Reforma de Córdoba de 1918.
“No hay nada que nos permita decir que es más importante resolver un problema tecnológico que solucionar la pobreza, la falta de vivienda o la indigencia; o privilegiar el desarrollo de una empresa con intereses lucrativos en vez de superar la violencia de género o cualquier discriminación. Para mi la violencia de género es tan o más importante que solucionar el problema técnico para lograr un producto más eficiente o mayores ventas. Sin embargo, somos una universidad que tenemos que ver el plexo social de una manera integral”, continuó el rector.
El rector recalcó que todas las universidades públicas costarricenses están comprometidas con una AS solidaria. “No somos estrictamente semejantes, aunque constantemente se nos compara. Tenemos que reafirmar nuestra diversidad y ver nuestras diferencias como una ventaja, como algo que habla a favor de la universidad pública. Cada una realiza la AS acorde a su propio modelo de organización”, aclaró.
“Renovar ese compromiso es una de las tareas, que yo no diría que está pendiente porque en eso hemos estado, pero es importante reafirmarlo una y otra vez ante las presiones externas. Debemos mantener una educación superior estatal que sea una vía para reducir la desigualdad social, que ya de por si es grande, y es un problema estructural del país. El Estatuto Orgánico es categóricamente claro, buscamos el bien común, el bienestar compartido de la ciudadanía”, concluyó el rector.