Cada año que pasa, en términos generales Costa Rica logra cerrar la brecha digital, esa odiosa desigualdad entre quienes pueden y los que no pueden tener acceso a Tecnologías de Información y Comunicación (TIC). Es sin duda una noticia positiva, sin diferenciar por ingreso, zona geográfica, edad o nivel educativo, cada vez más los habitantes en territorio costarricense tienen las mismas posibilidades de beneficiarse de las oportunidades digitales.
La afirmación anterior sin embargo no se puede generalizar, el estudio “Hacia la Sociedad de la Información y el Conocimiento para el 2017” elaborado por el Programa Institucional de la Sociedad de la Información y el Conocimiento (Prosic) de la Universidad de Costa Rica (UCR), revela también retos en cuanto a la brecha digital, que es por el contrario creciente en la población adulta mayor y con alguna condición de discapacidad.
¿Qué hicimos bien? De acuerdo con el Índice de Desarrollo de las TIC, (IDI por sus siglas en inglés), elaborado por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), Costa Rica ocupa el cuarto lugar en la región latinoamericana, está por debajo solo de Uruguay (47), Argentina (55) y Chile (56); y ocupa el puesto 57 de un total de 177 economías evaluadas en el 2016.
Es una buena calificación, que evidencia una tarea bien hecha en tres factores evaluados: acceso, uso y habilidad de la población para utilizar tecnologías. Es decir, que la población de Costa Rica tiene posibilidades reales de tener acceso a un celular, computadora e Internet, que además de tener el equipo necesario, usa las herramientas para navegar de forma más o menos intensa y que cuenta con las capacidades o habilidades que le permiten hacerlo.
Se puede puntualizar que “Hay un crecimiento sostenido de acceso de telefonía móvil e Internet y una disminución también sostenida de la brecha en dos de sus principales componentes: ingresos y nivel educativo” concluye Alejandro Amador Zamora, investigador del Prosic y responsable del capítulo sobre uso de las TIC en el informe anual del Prosic, 2017.
LEA TAMBIÉN: Informe Prosic-UCR 2017 ve al ICE debilitado
El informe Prosic-UCR para el presente año fue presentado el 4 de julio anterior y revela según la metodología utilizada, que del 2010 al 2016 se registra una reducción de la brecha digital para los hogares con jefatura femenina, para los habitantes de zonas rurales, para las personas de menos ingresos y de menor nivel educativo.
Sin embargo, la historia no es igual de positiva para los hogares con adultos mayores y personas en condición de discapacidad. Para estos casos la brecha digital por el contrario es creciente o se mantiene. (Ver recuadro: “Reducción de brecha digital”).
El trabajo para lograr desaparecer la brecha digital debe continuar y los pasos a seguir son claros. El más evidente es ofrecer más oportunidades a más personas de tener acceso a una computadora. La popularización del celular inteligente está sustituyendo a la computadora personal o PC, pero este paso no es del todo deseable.
La telefonía móvil se democratizó, el acceso a computadora no y eso tiene implicaciones pues el celular es limitado como un factor generador de riqueza.
“Con un celular no se puede escribir un documento, no se puede trabajar una hoja de cálculo, no es posible generar un buen diseño gráfico, el mismo Facebook para sus páginas comerciales ofrece muchas más opciones si se accesa desde una computadora”, explica el investigador del Prosic, Alejandro Amador.
El estudio del Prosic, 2017 demuestra que las personas de menores ingresos y con menor instrucción académica tienen muchas más dificultades y menos oportunidades de poder hacer uso de una computadora personal (PC). En la actualidad una persona con grado universitario tiene 12,28 veces más posibilidades de tener una computadora en comparación con personas con el menor nivel de instrucción, a la vez una persona del Quintil V (de más ingresos) tiene 9,46 veces más opciones de tener acceso a una PC, que aquellas de menores ingresos. Aunque estas desigualdades se han reducido del 2010 a la fecha, aun siguen mostrando la existencia de una brecha digital.
LE PUEDE INTERESAR: La democracia de Costa Rica se debilita en la pantalla de la TV
Por el contrario, el estudio no logra evidenciar la existencia estadística de una brecha digital por zona geográfica en cuanto a tenencia de móvil. Para el 2015, una persona de una zona urbana tenía 1,32 veces más posibilidades de tener acceso a telefonía móvil en comparación con una de zona rural, para el 2016 esa diferencia ya no existía, o al menos no se evidenciaba.
El uso de los contenidos que se despliegan en el celular y otros dispositivos sigue siendo un reto cada vez mayor para la población con alguna condición de discapacidad, que no solo debe solventar los problemas de acceso al hadware sino que también debe saltar la barrera de los contenidos no optimizados.
Para ellos la brecha digital es creciente, con la única excepción del acceso a celular, donde sí hay una reducción.
Al respecto, Alexa Torres, estudiante de filología española de la UCR, con condición de discapacidad visual y activista advierte que el país ocupa política pública que garantice acceso a los contenidos digitales a esta población.
Un caso similar experimentan los adultos mayores, para quienes la brecha también se está ampliando en las tres variables, acceso a Internet, tenencia de computadora y celular. El país no está ofreciendo a esta población creciente las condiciones necesarias para que logren aprovechar las ventajas de las TIC.
El uso de las TIC en todos los niveles también sigue siendo un reto. Cuando se habla de brecha digital hay distintos momentos y en un segundo nivel el concepto tiene que ver con la calidad de uso de las tecnología. El problema es medirlo, porque conocer la tenencia es relativamente fácil, pero medir el uso es mucho más complejo, es saber para qué se usa y qué ventajas reales aprovecha. Es una pregunta que cada usuario debe hacerse antes de empezar a navegar y cada vez que lo haga.
“Odds ratio” (OR) expresa qué tan probable es la variable dependiente (Tenencia de la TIC) cuando se encuentra en presencia otras variables. La tabla indica por ejemplo que los hogares con jefatura femenina en el 2016, tienen 0,64 veces más probabilidades de tener acceso a teléfono celular, que uno con jefatura masculina.
| OR Acceso a Internet | OR Tenencia de Computadora | OR Tenencia de Celular | ||||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Características del hogar | 2010 | 2015 | 2016 | 2010 | 2015 | 2016 | 2010 | 2015 | 2016 |
Jefatura Femenina | 0,81 | -- | -- | 0,63 | 0,71 | 0,77 | 0,81 | 0,65 | 0,64 |
Solo mayores de 65 años en el hogar | -- | 0,26 | 0,30 | 0,37 | 0,47 | 0,51 | 0,19 | 0,19 | 0,20 |
Personas con discapacidad en el hogar | 0,69 | 0,74 | 0,67 | 0,74 | -- | 0,79 | 0,77 | 0,69 | 0,51 |
Zona Urbana | 2,16 | 1,54 | 1,67 | 1,70 | 1,61 | 1,52 | 1,94 | 1,32 | -- |
Tamaño del hogar | -- | 1,08 | 1,06 | -- | -- | -- | 1,08 | -- | 1,31 |
Quintil de ingreso del hogar (Base Quintil 1) |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Quintil 2 | 1,68 | 1,57 | 1,36 | 1,72 | 1,61 | 1,85 | 1,64 | 1,70 | 1,65 |
Quintil 3 | 2,54 | 1,99 | 1,83 | 2,79 | 2,66 | 2,71 | 2,08 | 2,09 | 1,78 |
Quintil 4 | 5,24 | 2,98 | 2,93 | 4,54 | 4,48 | 4,78 | 3,40 | 3,01 | 2,98 |
Quintil 5 | 12,49 | 6,31 | 5,00 | 8,81 | 10,73 | 9,46 | 9,04 | 3,33 | 2,96 |
Característica educativas del hogar (Base Grado de instrucción primaria) |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Grado de instrucción secundaria | 4,87 | 1,90 | 2,08 | 3,50 | 3,62 | 2,74 | 1,77 | 3,00 | 2,11 |
Grado de instrucción universitaria | 16,38 | 3,95 | 4,61 | 17,24 | 17,09 | 12,28 | 3,49 | 6,42 | 3,48 |
Personas que asisten al sistema educativo en el hogar | 2,22 | 1,93 | 2,19 | 3,07 | 3,07 | 3,02 | 1,73 | 4,35 | 3,80 |
NOTA: Resultados de los OR de las regresiones logísticas.
Fuente: Informe Prosic-UCR, 2017 Tabla 4.16
© 2024 Universidad de Costa Rica - Tel. 2511-4000. Aviso Legal. Última actualización: noviembre, 2024