¿De cuáles cosas nos acordamos? ¿Por qué hay acontecimientos que decidimos invisibilizar de nuestros recuerdos? ¿Depende la historia de la persona que la esté contando? ¿El pasado tiene que darnos dolor o felicidad? ¿Con qué grado de detalle tenemos que recordar los momentos que nos marcaron la vida?
Estas preguntas son solo ejemplos de todas las interrogantes que deja abiertas “La Memoria Fría”, la puesta en escena que estrena el Teatro Universitario el 27 de abril.
“Nuestra posición es dejar un montón de preguntas sobre el escenario para que al final cada quien tome posición y decida una manera de pensarlo”, indicó Gustavo Monge, director de la obra.
"La Memoria Fría" es un viaje.
Es el paseo que realizan Lorena, Pablo, Flavia y Maxi, pero es también el recorrido por sus historias de vida y cómo éstas les terminan afectando.
Toda esta diversidad de experiencias, le permite a cada espectador encontrar coincidencias e identificarse con los dilemas de cada personaje; enfrascarse en los detalles del pasado, tratar de ignorar todas las experiencias anteriores o ser víctima de las circunstancias y terminar en el lugar equivocado en el momento menos indicado, son solo algunas de las opciones.
El texto y la puesta en escena se encargan de aumentar esa empatía y orientar las reflexiones que la representación plantea.
La obra es también un viaje por América Latina. Creada recientemente por tres artistas locales, obtiene diversos insumos sociales, culturales e históricos que fortalecen aún más el vínculo con el público.
Más que en temas políticos, el énfasis en esta ocasión, se centra en los seres humanos y su cotidianidad.
“Una de las premisas era abordar de frente, utilizando la materia como eje estructural, sin embargo el panfleto no es ni nuestro lenguaje artístico ni nuestra posición política. Nos interesa trascender la capa discursiva y ver más bien cómo esto se atraviesa en lo humano, en el día a día”, explicó Monge.
En la misma línea opinó Martín de Goycoechea, otro de los creadores.
“No escribo pensando en el rasgo político, sí creo que hay disparadores, pero si se convierte en político es en la relectura. Uno es contemporáneo a lo que escribe, contemporáneo a lo que habita, pero en este caso fue un proceso de escritura muy libre”, señaló.
La obra estará en cartelera del 27 de abril hasta el 21 de mayo. Se exhibe de jueves a sábado a las 8:00 pm y los domingos a las 6:00 pm.
La entrada tiene un costo de 5.000 colones para el público en general y de 4.000 para estudiantes y adultos mayores. Se pueden realizar reservaciones al 2511-6722.
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