“En retroceso” es como la directora del Centro de Investigación en Estudios de la Mujer (CIEM) de la Universidad de Costa Rica, Montserrat Sagot Rodríguez, describe en este 8 de marzo el estado de los derechos de las mujeres en la sociedad.
“Hubo un periodo en el que había mucho que celebrar, en el Siglo XX hubo cambios muy importantes para las mujeres…pero en el Siglo XXI nos encontramos en un contexto muy poco alentador” afirmó la Doctora en Sociología.
Según Sagot, el reconocimiento de las mujeres como ciudadanas, su incorporación masiva en el mundo educativo y su participación en puestos labores de toma de decisiones fueron victorias de una lucha histórica que hoy empieza a revertirse.
La situación nacional y mundial, evidencia el resurgimiento una realidad social permeada por muchas desigualdades como son el acoso sexual, la violación de derechos laborales y condiciones de mercado que limitan el desarrollo de las mujeres.
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Dichos aspectos desencadenan situaciones que según Sagot, ya no pueden ser ignorados, como es la tendencia al empobrecimiento de las mujeres en toda América Latina o la mayor afectación de esta población ante problemáticas sociales generalizadas.
Muestra de eso es que el porcentaje de desempleo femenino en Costa Rica sea del 11,2% frente a un 6,7% de desocupación masculina o que durante los últimos cinco años, se haya reportado un incremento del 80% en los asesinatos de hombres en Honduras frente a un 263% de decesos de mujeres.
“Cada vez hay más restricciones y grupos oponentes que antes no se atrevían a actuar de una manera tan misógina y ahora lo hacen abiertamente… estamos viviendo una batalla cultural por lo que significa ser mujer y ser una ciudadana plena” enfatizó la investigadora.
Aseguró que tal como ocurrió en el Siglo XIX, este retroceso ha hecho que las mujeres reaccionen, evidenciando su convergencia y actitud de lucha por medio de acciones de denuncia y movilización.
“Todo nos indica que después de vivir un periodo de logros y de relativa pasividad, el movimiento de mujeres está regenerándose y volviendo a surgir con mucha fuerza. Ya no es algo que pueda pasar desapercibido”, señaló Sagot.
Sagot enumera los derechos sexuales y reproductivos, la violencia en sus diferentes formas y el acceso a los recursos, como las principales batallas que en este momento deben dirigir la lucha feminista, dentro del que vuelve a evidenciarse la ausencia de un reconocimiento real de las mujeres como seres humanos.