La carrera de Bachillerato en Ciencias Médicas y Licenciatura en Medicina y Cirugía que imparte la Escuela de Medicina de la UCR, recibió una nueva acreditación que respalda, bajo estándares internacionales, la calidad de los futuros médicos que tendrá Costa Rica.
Con el nuevo documento, esta unidad académica se convierte oficialmente en la única del país en contar con tres acreditaciones ininterrumpidas en su campo de especialización, desde que alcanzó su primer certificado de excelencia en el 2001 por parte del Sistema Nacional de Acreditación de la Educación Superior (Sinaes).
Este logro, que se desprende de múltiples esfuerzos, un riguroso trabajo de evaluación y colaboración conjunta a nivel nacional y mundial, asegura la formación de profesionales con los más altos criterios de rigurosidad académica por otros seis años más. Al mismo tiempo, garantiza que los conocimientos adquiridos responden a las exigencias que se demandan a nivel internacional, de la mano con las necesidades de salud que presenta el país.
De acuerdo con la directora de la Escuela, la Dra. Lizbeth Salazar Sánchez, la acreditación es una muestra clara del compromiso que posee la UCR ante la búsqueda constante de la mejora continua, y revalida el posicionamiento que la institución ha logrado al preparar profesionales con una alta formación científica, técnica y moral.
“Para la UCR la salud de los costarricenses no es un juego. Por lo tanto, tampoco lo es la formación de nuestros profesionales. Durante este proceso de mejora, logramos reformas curriculares con miras a las necesidades de nuestra sociedad costarricense. Se incluyeron cursos de geriatría y se fortalecieron los cursos de formación para la atención del primer nivel, entre otras modificaciones, sin descuidar las materias que son pilares en la formación médica” indicó la Dra. Salazar.
Para lograr la acreditación, la Escuela superó con éxito las tres etapas obligatorias del proceso que exige el Sinaes. La primera se enfocó en la autoevaluación. La segunda fue la evaluación externa a cargo de especialistas de Chile, México y Colombia. Por último, la tercera estuvo orientada al cumplimiento del compromiso de mejoramiento continuo.
Ella es Andrea, un simulador de alta fidelidad que reproduce de forma muy parecida los aspectos fisiológicos de una mujer embarazada. El dispositivo genera los movimientos del bebé de forma automática y da la posibilidad que los estudiantes tengan un primer acercamiento sobre cómo atender desde un parto vaginal hasta uno más complejo. Andrea es parte de los nuevos recursos tecnológicos que servirán para fortalecer la excelencia académica y la mejora continua asumida en la acreditación.
Anel KenjekeevaCon el nuevo certificado, sus egresados también estarán amparados por la ley 8798. Esta ley le confiere al Sinaes el carácter de normas de calidad nacional. Además, faculta al estado costarricense, así como sus instituciones, para contratar de forma preferente a los graduados de carreras oficialmente acreditadas.
“La universidad de excelencia es aquella que reconoce que siempre puede superarse”. Así lo dijo el rector de la UCR, el Dr. Henning Jensen Pennington, quien resaltó la transformación como elemento permanente de auto-conocimiento para estar a la vanguardia en procesos de enseñanza, mismos que desembocan en investigaciones de avanzada y de una intensa relación con la sociedad.
Ese pensamiento también fue compartido por el estudiante Juan Pablo Alpízar, al brindar un motivador discurso que caracterizó la excelencia como un sendero cambiante pero satisfactorio, que involucra el trabajo duro y el sacrificio constante para estar, finalmente, al servicio de la gente.
“Como estudiante, mi mayor reto es aprender. Estos años de estudio me han dado cinco lecciones. La primera es que la excelencia no es un destino, es un camino. Tomar esa ruta implica tomar el trayecto difícil mientras otros buscan la salida sencilla. Significa abnegación, resiliencia y, especialmente, caminar con la convicción de hacerlo bien pese a las circunstancias adversas”, destacó Alpízar.
El presidente del Consejo Nacional de Acreditación, el M.Sc. Arturo Jofré Vartanián, felicitó a la UCR por los esfuerzos que ha realizado para mantener los estándares de calidad académica, y ser una de las primeras unidades en someterse al proceso de acreditación cuando se fundó el Sinaes.
“La Escuela de Medicina de la UCR es el motor que hizo posible llegar a esos niveles de calidad. Ustedes han logrado inclusive obtener acreditaciones que superan los cuatro años normales por las características que presentan. También, quiero felicitarlos por obtener siempre los primeros lugares en las pruebas de internado clínico que ha realizado el Centro de Desarrollo Estratégico e Información en Salud y Seguridad Social (Cendeisss). Esto es una muestra clara del enorme trabajo que ha hecho esta escuela a lo largo del tiempo, y no queda más que sentir orgullo de lo que ustedes han estado logrando”, mencionó.
La entrega formal la realizó el Sinaes el viernes 27 de octubre, después de inaugurarse el edificio anexo de la Facultad de Medicina. Esta moderna infraestructura dará la posibilidad de responder al crecimiento de la población estudiantil, la implementación de nuevas metodologías de enseñanza, así como ampliar la cantidad de cursos propios y de servicio que se ofrecen.