Escuela de Química pasa prueba de autoevaluación y gestión de la calidad

Los estudiantes de Química de la Universidad de Costa Rica son los principales beneficiados con la reacreditación de la carrera por seis años, como resultado de la cultura de autoevaluación y de la gestión de la calidad que la Escuela ha impulsado en los últimos años (foto ilustrativa archivo ODI).

 Los estudiantes de Química de la Universidad de Costa Rica (UCR) ya han empezado a ver los resultados positivos del proceso de autoevaluación y gestión de la calidad que se han implementado y que les beneficia de forma directa, gracias a lo cual la carrera obtuvo la reacreditación por un período de seis años.

El impulso al mejoramiento continuo forma parte del quehacer de la Escuela de Química, con la participación y compromiso de docentes, personal administrativo y los estudiantes. Estos esfuerzos fueron reconocidos por el Sistema Nacional de Acreditación de la Educación Superior (Sinaes), que otorgó el certificado a la calidad de la carrera de bachillerato y licenciatura en Química por el período de junio de 2017 a junio del 2023.

La carrera fue acreditada en el año 2012 y la reacreditación se otorgó por el cumplimiento de una gran parte de las metas planteadas en el plan de mejora hace cuatro años. "En general tuvimos un desempeño muy bueno, más del 50 % de mejora en comparación a hace cuatro años. Hemos mejorado en la adquisición de nuevos equipos, en la formación de docentes y en didáctica, nuevas plazas, mejoramiento de las instalaciones y de la seguridad", explicó la M.Sc. Paola Fuentes Schweizer, coordinadora de la comisión de acreditación.

Por su parte, el Dr. Cristian Campos Fernández, director de la Escuela, se mostró muy satisfecho por lo resultados alcanzados. Resaltó el hecho de que las reacreditaciones se otorgan generalmente por cuatro años y son pocas las carreras que la obtienen por seis años, como es el caso de Química.

"Estoy muy agradecido con la comisión de acreditación. Hizo un trabajo loable y desinteresado. Lo único que me tiene con un poco de tristeza es que todavía no nos han dado la fecha para la ceremonia y considero que la Escuela hizo un trabajo meritorio para recibir recibir la medalla de acreditación", manifestó.

¿Cómo fue el proceso?

Para los académicos de la Escuela de Química, los logros obtenidos no hubieran sido posibles sin un estricto orden y seguimiento a las decisiones y actividades del proceso de reacreditación, con metas, objetivos, personas encargadas, fechas y una buena comunicación.

La construcción de rampas de acceso al edificio de Química es uno de los aspectos contemplados en el plan de mejoramiento de la planta física (foto Cristian Araya).

Una de las ventajas de los profesionales en Química es que son disciplinados y en su trabajo están acostumbrados a seguir los planes y programas al pie de la letra. "Como químicos, estamos acostumbrados a acreditar y a los sistemas de gestión", indicó Campos, razón por la cual la etapa de reacreditación se les facilitó.

La sistematización de la información es otro elemento que contribuyó a los buenos resultados. Según la coordinadora de la comisión, se distribuyeron las responsabilidades de acuerdo con las fortalezas de cada miembro y todos tenían acceso a la información. Asimismo, se trabajó con coordinadores de secciones y de comisiones, se realizaron talleres para el personal docente, administrativo y para los estudiantes. Esto posibilitó que la información fluyera entre todos los sectores. También, se coordinó muy bien con la Asociación de Estudiantes.

Al respecto, Campos señaló que la participación del estudiantado fue muy importante. "El movimiento estudiantil siempre ha sido una fortaleza, porque es un movimiento proactivo, busca procesos de mejoramiento, actividades académicas, etc. Ellos siempre están buscando el bienestar de la Escuela", agregó.

Cultura de la autoevaluación

Desde la década de los años 90, la Escuela de Química empezó a impulsar la cultura de la autoevaluación y darle seguimiento a los procesos. "Somos muy críticos y siempre andamos buscando cómo mejorar", expresó Fuentes.

Por su parte, Campos dijo que la Escuela se caracteriza por ser muy ordenada, lo que les permite cumplir con los ojetivos propuestos en todos los ámbitos sustanciales de la UCR: docencia, investigación y acción social.

"Esta unidad académica es atípica debido a los cursos de servicio que ofrecemos. Los docentes tenemos doble responsabilidad: los cursos de la carrera y los cursos para estudiantes de otras carreras. Entonces, si se da una situación fortuita, estamos en mayor capacidad de responder ante esas situaciones", recalcó.

La Escuela de Química ha implementado medidas de seguridad por tratarse de una unidad académica que maneja sustancias de alto riesgo. Por lo tanto, fueron demarcadas áreas de emergencia (foto Cristian Araya).

La formación académica es uno de los aspectos evaluado durante el proceso con la participación de un grupo de evaluadores externos, que en este caso fueron los especialistas M.Sc. Juana Coto Campos, de Costa Rica; Dr. Mario Suwalsky Weinsymer, de Chile y Dr. José Guillermo Penieres Carrillo, de México.

El currículo de la carrera se modificó hace 11 años y en adelante se ha ido adaptando a las necesidades de la profesión y condiciones del país. "Tenemos un programa bastante actualizado", detalló la coordinadora de la comisión de acreditación.

Jonatan Ramírez Torres comentó que como miembro de la Asociación de Estudiantes de Química y quien cursa el cuarto año de la carrera, participó en reuniones con los evaluadores externos para expresar el punto de vista de los alumnos sobre algunos cambios que desean ver en la malla curricular y en la evaluación.

"Nosotros queremos que la carrera se actualice un poco más ante lo que está pidiendo el mercado actualmente, que sea una carrera más innovadora, que cumpla con las expectativas que tiene la industria", señaló.

Los estudiantes también demandan mayores habilidades de comunicación y sociales, y que esta área de la formación se incluya en la malla curricular y en las evaluaciones. "Por dicha la Escuela ha tenido una reacción muy positiva y muchas de las observaciones de los evaluadores externos se piensan implementar en los próximos años", aseguró.

Estudiantes: los más beneficiados

Para los profesores, uno de logros más importantes del plan de reacreditación es la apertura semestral de todos los cursos de la carrera, lo cual beneficia de forma directa a los estudiantes.

La adquisición de equipos muy sofisticados para la docencia y la investigación es otro de los puntos considerados para otorgar la reacreditación a la carrera de Química de la UCR (foto archivo ODI).

"La crítica de los estudiantes era que los cursos se ofrecían solo una vez al año y por esta razón se atrasaban en sus estudios. En cambio, ahora ya casi no tenemos demanda insatisfecha", expresó Campos.

Otra medida que se implementó es la realización de la Prueba de Habilidades Cuantitativas (PHC) para los estudiantes que desean ingresar a la carrera. Química fue una de las primeras carreras en adoptar esta prueba en el 2015 junto a otras seis carreras. "Nosotros debemos decirle al estudiante que estudiar Química no es fácil. La idea con esta prueba es que sirva de filtro e ingresen aquellos estudiantes que realmente tengan vocación. En poco tiempo vamos a medir la efectividad de esta prueba", dijo Fuentes.

Asimismo, se ha podido mejorar en cuanto a la adquisición de equipos, presupuesto y planta física. Se instaló un elevador y una alarma con sonido y luz para beneficiar a la población con discapacidad, rampas externas de acceso, se hizo la demarcación de una zona de emergencia frente al edificio y se va a construir una nueva planta física para la proveduría, con el fin de reforzar las medidas de seguridad, ya que en esta área se guardan sustancias de alto riesgo.

Además, han aumentado las plazas docentes y administrativas y se han implementado medidas para mejorar la salud ocupacional del personal.

La reacreditación de la carrera "ha permitido que la Escuela de Química justifique de manera cuantitativa las plazas docentes y administrativas solicitadas. La administración superior ha respondido ante las necesidades que teníamos y que se pudieron justificar muy bien con datos y documentos que las respalden", expresó el director.

Uno de los retos hacia futuro es reducir el tiempo que los estudiantes tardan para graduarse, lo cual a criterio de los entrevistados es difícil, ya que esto está relacionado no solo con la pérdida de cursos, sino también porque el estudiantado se involucra en actividades extracurriculares, de investigación y de acción social.