Las candidaturas presidenciales para el 8 de noviembre en Estados Unidos ya están decididas. El Partido Demócrata llevará como principal ficha a Hillary Clinton y el Partido Republicano presenta a Donald Trump.
Por si solas estas opciones resultan atípicas dentro de la historia estadounidense. Clinton se posiciona como la primera mujer que logra ser candidata presidencial en uno de los principales partidos de la nación norteamericana; y Trump es un empresario millonario que no surge de las bases ni de los valores más tradicionales del Partido Republicano.
Según explicó el Bach. Javier Johanning, investigador del Observatorio de Política Internacional de la UCR*, esta elección presidencial tiene sus particularidades entre las que destacó la incursión de agentes políticos no tradicionales, la falta de confianza en las instituciones del Estado y el deterioro de las condiciones económicas
“Una de las particularidades ha sido la llegada de agentes no tradicionales dentro de la esfera política estadounidense. Estamos viendo políticos y extraños que se han venido involucrando y han tenido un gran apoyo por parte de la población, que han sacudido las bases de esas élites políticas que habían estado tan acostumbradas a gobernar en Estados Unidos”, recalcó Johanning.
Ante este panorama, una interrogante que surge es cuáles han sido las causas para que esto esté sucediendo. Johanning expresó que la crisis económica del 2008 afectó mayoritariamente a la clase media que estaba endeudada y esto tuvo como consecuencia que esta población perdiera confianza en las instituciones y en la política tradicional.
Otro aspecto es que los ciudadanos estadounidenses, se han vuelto más proteccionistas y mucho más xenofóbicos ante la inmigración musulmana, pues la opinión pública resiente que el Gobierno no hace lo suficiente para proteger los intereses nacionales y la seguridad. Una situación que se viene presentando desde el 2001 y que parece haberse acrecentado en los últimos años.
“Aprovechando este contexto han surgido algunas voces conservadoras y reaccionarias que han tomado poder y han sido escuchadas por el electorado”, manifestó Johanning.
En el Partido Demócrata, Hillary Clinton se presenta como la continuación de la administración Obama y el mismo mandatario ya le ha dado su apoyo.
Fue Primera Dama, Senadora y Secretaria de Estado y ha venido preparando su camino presidencial luego de dejar la Casa Blanca en 2001.
Fue la primera mujer en ser nombrada senadora por el estado de Nueva York y al asumir la Secretaría de Estado en 2009 se logró consolidar como una opción para optar por la presidencia de Estados Unidos.
Algunos aspectos negativos que envuelven la figura de Clinton son su baja popularidad, su falta de habilidades en oratoria y la poca capacidad que tiene para emocionar y generar empatía entre los electores.
Otro aspecto que ha jugado en su contra es el escándalo por el uso de una cuenta de correo electrónico privada, durante el periodo que sirvió como Secretaria de Estado, que incluso suscitó a una investigación por parte del FBI.
Al otro lado, en el Partido Republicano, se encuentra Donald Trump, empresario multimillonario quien ha centrado su vida profesional en el campo de bienes raíces y la construcción de grandes proyectos inmobiliarios a nivel mundial, como hoteles, casinos, campos de golf, entre otros.
También ha estado involucrado en el mundo del entretenimiento al tener acciones de la organización de Miss Universo. Uno de los proyectos que más notoriedad le dio en los últimos años fue el reality show “el Aprendiz” en el que participó como presentador.
Ha sido contribuyente de campañas tanto del Partido Republicano como del Demócrata y en varias oportunidades manifestó sus intenciones de presentar su candidatura sin llegar a concretarse.
Desde que anunció su precandidatura para las elecciones presidenciales de 2016, la polémica ha estado presente en su discurso populista y radical, especialmente por su posición ante la migración latina y musulmana, las mujeres y su visión de la política exterior y del papel de los Estados Unidos en el mundo.
*El Observatorio de la Política Internacional es un proyecto conjunto entre la Universidad de Costa Rica y la Universidad Nacional que inició en abril de 2008 con el objetivo de constituir una instancia permanente dedicada al seguimiento sistemático y el análisis específico de la política exterior costarricense y sus relaciones internacionales.
Pueden ingresar a la página http://opi.ucr.ac.cr/ y leer más información sobre éste y otros temas de política internacional.
Una vez confirmadas las candidaturas, tanto Clinton como Trump, se dirigieron al electorado estadounidense en sus respectivas convenciones, dando inicio así a la campaña final que llevará a alguno de estos personajes a ocupar la Casa Blanca.
El politólogo Javier Johanning hizo un análisis de los discursos de ambos candidatos y también presentó algunos de los retos que ambos tendrán durante la contienda presidencial.
En el caso de Hillary Clinton, Johanning explicó que su discurso se distinguió por proclamase como la candidata con experiencia y más apta para asumir el puesto. Así mismo se posiciona como la opción del pluralismo, las libertades y el respeto a los Derechos Humanos, una alternativa para todos los sectores y segmentos de la sociedad estadounidense, sin importar su ideología política, su procedencia étnica, social, religiosa o económica.
“Clinton atacó constantemente a Donald Trump, no sólo directamente acusándolo de racismo e incompetencia, entre otras cosas, sino que también indirectamente, mostrándose como la antítesis de Trump”, recalcó.
Así mismo, Clinton habló sobre una reforma fiscal progresista para la creación de miles de nuevos empleos y recurrió a dirigirse directamente a los seguidores de Bernie Sanders con el propósito de lograr su apoyo.
En su discurso apeló más a la razón del electorado que a sus emociones y los temas en los que hizo énfasis fueron la economía, la seguridad social, la política exterior, la seguridad nacional y el combate al terrorismo.
Según Johanning, ante la contienda presidencial, Clinton tiene como principales retos generar confianza y mejorar su percepción ante el electorado; unificar al Partido Demócrata bajo su liderazgo, por lo que necesita que su discurso y sus políticas sean atractivas tanto para los seguidores de Bernie Sanders, como para los de su propia base.
Debe buscar que la clase trabajadora y los jóvenes le den su apoyo y sobre todo debe convencer a una sociedad estadounidense sumamente patriarcal y conservadora, para que elijan a la primera mujer presidenta de los Estados Unidos.
*Foto tomada de la página www.hillaryclinton.com
Mientras tanto, Donald Trump en su discurso de aceptación de la candidatura republicana habló principalmente de terrorismo y seguridad; economía y migración.
Según el análisis de Johanning, el discurso de Trump “se encuentra plagado de recursos discursivos que, de una u otra forma, se inspira en posiciones autoritarias, populistas y totalitarias”. Al mismo tiempo las propuestas son ambiguas y abstractas y van dirigidas a lo que sus seguidores quieren oír.
Otro aspecto que se le ha criticado es el manejo erróneo de datos y esta ocasión no fue la excepción. En algunos temas como la situación económica, el desgaste del ejército, la criminalidad y la seguridad, los expertos y analistas expresaron que utilizó los números a su antojo.
Entre sus principales propuestas destaca una reducción significativa de impuestos y estandarizar el cobro de impuestos para todos los sectores de la población; eliminar Obamacare; incentivar la industria de energía nacional (petróleo y gas natural), así como a la industria minera y acero; imponer una prohibición al ingreso de musulmanes al país.
Para Johanning, el candidato republicano seguirá con su campaña pues esto le ha dado muy buenos resultados. Sin embargo debe buscar el apoyo de las bases del partido y de sus líderes, aunque no ha necesitado de esto para alcanzar la candidatura.
*Foto tomada de la página www.donaldjtrump.com
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