Estudiantes de la Sede de Occidente tienen la oportunidad de cursar talleres en música como una opción complementaria a su preparación académica, por medio del proyecto impulsado desde la Coordinación de Vida Estudiantil y denominado Arte Libre Musical.
Según Mario Salazar Arguedas, estudiante de Derecho de la Sede y quien inició el proyecto hace cuatro años, Arte Libre Musical pretende ofrecerles a los estudiantes que tengan interés en tocar instrumentos, una opción que se adapte a sus necesidades y a sus obligaciones académicas.
Es así como el proyecto inició con talleres de guitarra, después se incorporó guitarra eléctrica y para este año incluyeron además bajo, violín y batería.
Salazar mencionó que a pesar de que quienes ofrecen los talleres tienen muy claro que se debe respetar el objetivo principal del estudiante de la Sede, que es cursar una carrera universitaria, trabajan por medio de una metodología que facilita el aprendizaje. En esta población “hay una necesidad musical, pero es gente que lo quiere aprender como un complemento a la formación profesional que reciben” aseguró.
De esta forma, quienes se inscriben pueden aprender a tocar un instrumento por medio de cinco talleres, uno por semestre para una duración total del proyecto de dos años y medio.
En los talleres “vamos implementando mucha práctica desde el principio y a como van avanzado los semestres vamos incluyendo teoría, armonía, apreciación”. Salazar mencionó que después de experimentar algunas metodologías confirmaron que con esta población se debe dejar la teoría para el final, “ya que debemos aprovechar las ganas de aprender a tocar y que poco a poco se vayan interesando por la teoría”.
Detalló que del nivel uno al tres se enfocan en ritmos, ejercicios y técnicas para desarrollar el instrumento, en el nivel cuatro se incorpora la teoría con la idea de que el estudiante pueda realizar sus propias composiciones en el nivel cinco.
Además de las clases, que es una por semana, por medio del proyecto se implementan una serie de actividades como: tardes de guitarra, café guitarra, clases maestras, clases de apreciación musical y recitales.
Para Salazar este proyecto trae múltiples beneficios a los estudiantes ya que les ofrece un espacio para despejarse dentro de sus obligaciones universitarias, les permite aprender a disfrutar la música y encontrarse con el arte.
Además es una oportunidad para aquellos estudiantes que se sienten atraídos por la música y que no cuentan con recursos económicos para ingresar a alguna academia de música.
Todos los profesores del proyecto Arte Libre Musical son estudiantes de la Sede de Occidente, que han tenido la oportunidad de recibir preparación académica en diferentes instrumentos y que voluntariamente comparten sus conocimientos con otros estudiantes.
Salazar señaló que en estos cuatro años el proyecto ha evolucionado satisfactoriamente ya que se inició con la oferta de un instrumento y actualmente se ofrecen cinco, y que para un futuro se piensa incluir otras actividades artísticas relacionadas con la música.