Barrios chinos americanos fueron espacios de resistencia socio-cultural

La Dra. Yrmina Eng hizo un recorrido histórico por la formación de los barrios chinos en América y su importancia para los migrantes (foto Laura Rodríguez).

A mediados del siglo XIX, comenzaron a llegar los primeros chinos al continente americano. Estos pobladores fundaron sus barrios en ciudades como La Habana, Lima y San Francisco, como expresión de resistencia socio-cultural, explicó la Dra. Yrmina Eng Menéndez, antropóloga de la Universidad de La Habana, Cuba.

La especialista Eng quien visitó la Universidad de Costa Rica recientemente, con motivo del Simposio Internacional sobre Estudios de China, manifestó que con la creación de los barrios chinos en América, se muestra una etnocultura de resistencia, marcada por la distancia entre la cultura de la sociedad anfitriona y la de la comunidad insertada.

De esta manera, los migrantes chinos se establecieron en nuevas sociedades donde estructuraron su propio sistema interno y reprodujeron sus tradiciones.

Como resultado del intercambio con la comunidad receptora se generaron manifestaciones propias del proceso de transculturación, que incluía rasgos característicos de ambos espacios geográficos.

Los principales barrios chinos se localizaron en los centros de las ciudades, cerca de donde se desarrollaban las actividades comerciales más importantes. Estos espacios eran integrales, de modo que la función residencial se complementaba con otros aspectos de la vida cotidiana como educación, religión, comercio, servicios y diversión.

El espacio Viernes de Cultura China pretende acercar a las personas interesadas a descubrir distintos aspectos sobre el país asiático (foto Laura Rodríguez).

Estas ciudades asiáticas en miniatura han sido una expresión de la segregación etno-espacial de los inmigrantes chinos en los países donde se asentaron, aseguró Eng.

Agregó que han constituido una manera de conservación transculturada de las tradiciones y los valores chinos, generando nuevas formas de expresiones culturales.

Las sociedades receptoras se apropiaron de los elementos nuevos para luego asimilarlos e incorporarlos en su cotidianeidad.

Los barrios chinos americanos mantuvieron una fuerte interrelación entre ellos, pues comerciaban y se mantenían comunicados por medio de los periódicos y publicaciones que viajaban entre países.

En la actualidad, la migración china se mantiene con matices diferentes. Ya no solamente se presentan las formas tradicionales si no que las nuevas condiciones de una China próspera, conlleva otro tipo de relación con las comunidades a donde se asientan. En este momento el surgimiento de barrios chinos se relaciona más con intereses comerciales.

La conferencia Los Barrios chinos tradicionales como expresión de resistencia socio-cultural en la emigración fue organizada por el espacio Viernes de Cultura China del Programa de Difusión de a Cultura China del Instituto Confucio de la Universidad de Costa Rica.