Fomentar el diálogo social y buscar el equilibrio entre los objetivos políticos, sociales, culturales, económicos y ambientales del país, se presenta como un medio para lograr el desarrollo de Costa Rica. Esta fue una de las principales conclusiones de la mesa redonda ¿Hacia dónde podría ir Costa Rica? Análisis del presente y sus principales desafíos.
Esta actividad fue organizada recientemente por la Escuela de Historia y contó con la participación del Dr. Juan Manuel Villasuso Estomba, el Dr. Luis Guillermo Solís Rivera y el Dr. Aníbal Barquero Chacón, quienes se reunieron para generar ideas y discutir sobre el presente y el futuro de Costa Rica.
El Dr. Juan Manuel Villasuso, ex director del Programa Sociedad de la Información y el Conocimiento, explicó en su presentación que el país se puede analizar desde cinco dimensiones: económica, social, política, ambiental y cultural. Cada dimensión tiene objetivos diferentes que son deseables en el desarrollo de una nación, sin embargo, no siempre se pueden alcanzar al mismo tiempo e incluso pueden resultar incompatibles entre sí. Lo anterior, representa un reto para Costa Rica, pues debe conciliar los diferentes intereses en un mismo escenario.
Por ejemplo, el Dr. Villasuso explicó que los objetivos sociales principales del país suelen apuntar hacia la equidad en la distribución de los ingresos y las oportunidades de movilidad social, así como la reducción de la pobreza. Por otro lado, la dimensión económica apunta al crecimiento económico de una nación y la generación de riqueza, lo cual puede resultar disfuncional con lo que se plantea a nivel social.
“Para que el Estado pueda cumplir su responsabilidad social de lograr mayor equidad, brindando servicios que la sociedad demanda, requiere recursos que vienen de lo económico, pero que muchas veces parte de la sociedad no está dispuesta a dar esos recursos. Lo que hemos visto en los últimos años es que la sociedad costarricense se ha hecho más inequitativa”.
El Dr. Villasuso señaló que actualmente se presenta el desafío de conciliar la dimensión ambiental que busca la protección y sostenibilidad de los recursos naturales, con la dimensión económica que promueve la inversión y el uso de dichos recursos.
“Muchas empresas se niegan a moverse hacia tecnologías más limpias porque eso encarecería sus costos de producción y eso las haría perder su competitividad a nivel interno y externo. Aquí tenemos otro problema que tiene que ver con las políticas que se están aplicando y que entran en conflicto con los objetivos tanto de crecimiento económico como de sostenibilidad”.
Para desarrollar políticas públicas acordes con las diferentes dimensiones de la realidad costarricense, el Dr. Villasuso explicó que es necesario fomentar la participación social en la toma de decisiones para evitar que diferentes grupos de interés acaparen el poder.
“En el juego democrático, los intereses se confrontan, y precisamente porque las cosas son así, es que se necesita que haya en la sociedad y en las instituciones políticas, contrapeso suficiente para enfrentar a esos grupos que haciendo ejercicio del poder buscan el beneficio propio”.
El Dr. Villasuso finalizó su presentación destacando la importancia de que la sociedad participe, pues es la única forma de sostener una sociedad democrática y sus instituciones.
El diálogo social como herramienta para el desarrollo
Por su parte, el profesor de la Escuela de Ciencias Políticas, Dr. Luis Guillermo Solís Rivera centró su presentación en el presente y el futuro político costarricense. El Dr. Solís partió de la premisa de que la representatividad y el diálogo social son necesarios para lograr el desarrollo del país.
Para el Dr. Solís, Costa Rica ha evolucionado desde 1948 hasta la actualidad, un proceso que abarca lo social, económico y ambiental. Dentro de los cambios destacó la urbanización del país, la reducción de la economía agrícola, los cambios demográficos como el envejecimiento poblacional y el aumento de las migraciones.
“El problema es que al cambiar los valores, la economía, la sociedad y no cambiar las instituciones, se produce una disfunción entre esa sociedad cambiada y la forma como estábamos organizados para administrarla”, apuntó el Dr. Solís para explicar que cada vez es más difícil llegar a consensos en la esfera política.
Para lograr una mejor gobernabilidad es necesario el diálogo social donde la sociedad se encuentre para definir pactos sociales y resuelvan problemas nacionales. “El problema entonces, no es la falta de ideas, sino de grandes concertaciones”, afirmó el Dr. Solís.
El diálogo social implica desarrollar alianzas y lograr entendimientos entre los partidos políticos, pues según el profesor, en Costa Rica ya no existen las mayorías políticas. También es necesario articular organizaciones sociales, defender el equilibrio entre poderes para evitar la corrupción y estar atentos al contexto que rodea al país.
“Tenemos que salirnos del debate pequeño nacional y mirar lo que está pasando a nuestro alrededor, para imaginar el futuro que nos toca”, concluyó el Dr. Solís.