Sus trazos y colores fuertes atraen las miradas y dejan vagar la imaginación de los espectadores. Aunque contiene algunas referencias figurativas, como un rostro y el desagüe de una acera, su interpretación es libre, como libre es el arte abstracto.
Ubicada a la entrada del edificio Administrativo C de la Universidad de Costa Rica (UCR), la obra Abstracción del artista y arquitecto Walther Hidalgo Xirinachs, fue restaurada con el fin de que recobrara su brillo original.
Su reinauguración se llevó a cabo recientemente con la presencia del autor y su familia, los artistas Grace Herrera y Luis Paulino Delgado, autoridades universitarias y público asistente.
La restauración de esta obra estuvo a cargo de la antropóloga y artista Alicia Zamora Murillo, y contó con el auspicio de la Rectoría y de la Oficina de Divulgación e Información de la UCR.
Según dijo el director de la Escuela de Artes Plásticas, Erick Hidalgo Valverde, la restauración de las obras de arte que posee la Universidad se enmarca dentro de la labor de embellecimiento de los espacios públicos, que se propuso realizar la Comisión de Conmemoración del Septuagésimo Aniversario de la UCR.
También señaló que conforme el Campus Universitario fue creciendo experimentó un proceso de modernización y con ello la instalación de obras de arte en diferentes sitios, como el mural de Grace Herrera en el edificio administrativo A y el de Walther Hidalgo en el edificio C, los cuales complementan el diseño arquitectónico y le dan presencia y embellecimiento. De allí la necesidad de rescatarlas del deterioro que sufren con el tiempo.
Arte público
El mural Abstracción fue realizado por Hidalgo cuando era muy joven y corresponde a una técnica mixta, ya que tiene algunas referencias figurativas y otros componentes que son del arte abstracto.
Al respecto el artista señaló que la interpretación de una obra depende más del espectador que de las intenciones del autor, pues justamente el arte abstracto permite esa libertad.
Agregó que en el arte en general lo que prima no es la intención del artista, sino la experiencia que produce en la persona. Esa experiencia poética se produce cuando el espectador vive la obra, y es allí donde se completa la obra de arte.
También apuntó que esta obra colocada a la entrada del edificio C como un mural, representa ese traslape entre el arte y el espacio arquitectónico y público.
Para él esta creación es muy significativa, ya que no es un cuadro de caballete, independiente de su contexto, sino que está emplazada en un espacio público y cobra un valor simbólico importante, porque es precisamente ese traslape entre el arte y el espacio arquitectónico y público. “Es una forma de tener el arte metido dentro de estas redes sociales intangibles que marcan nuestra vida”, enfatizó el artista Hidalgo Xirinachs.
En este sentido comentó que actualmente está impulsando la creación de un parque público en Desamparados, en el que colaborará la UCR, el cual además de ser un espacio para la convivencia cívica, tendrá obras de arte.
Trabajo de restauración
Según apuntó la restauradora Alicia Zamora, la película pictórica de la obra de Hidalgo tenía problemas de suciedad, resequedad, craqueladuras y desprendimientos.
También el soporte presentaba sensibilidad del comprimido de madera por exposición a la humedad y desnaturalización, suciedad y residuos de productos de limpieza para el piso, especialmente en la parte inferior, y desgastes, golpes y rayones.
De manera que el trabajo de conservación y restauración que se le hizo incluyó la limpieza de la parte posterior del soporte, la aplicación de fungicida y preservante para la madera, la consolidación del soporte por el reverso y en áreas del anverso que estaban afectadas por el desgaste y los golpes, la aplicación de capa de fibra de vidrio en las partes erosionadas y la impermeabilización del reverso de soporte con resina.
También comprendió, entre otros, la limpieza mecánica y química de la capa pictórica y su humectación y regeneración, el resane de los faltantes de color, la reintegración del color con pigmentos al barniz de la Maimeri, y el montaje de la obra en el sitio original, elevando su altura para que esté menos expuesta a los problemas mencionados.
En este sentido, Zamora comentó que es importante que en el país se haga conciencia de la necesidad de restaurar las obras que tenemos para su conservación.
También señaló que quienes tienen a cargo la medicina del arte, cuentan con una serie de instrumentos y materiales para salvar la obra. Agregó que, aunque es un reto técnico y artístico, buscan mantener lo que el artista quiso expresar y conservar al máximo su originalidad.© 2024 Universidad de Costa Rica - Tel. 2511-4000. Aviso Legal. Última actualización: diciembre, 2024