“Si logramos construir sistema de protección de derechos estamos construyendo contextos saludables, aunque la mayoría de las familias pobres tienen indudablemente pocas posibilidades de crear en todos sus alcances entornos y prácticas saludables”, manifestó la Magistra Laura Acotto, en la conferencia inaugural el III Simposio Internacional y VII Nacional sobre Derechos de la Niñez y la Adolescencia Entornos y prácticas de vida saludables en la Niñez y la Adolescencia.
Esta actividad organizada por el Programa Interdisciplinario de Estudios y Acción Social de los Derechos de la Niñez y la Adolescencia (Pridena) se inició este martes 4 de octubre y se prolongará hasta el 6 de octubre, con la participación de profesionales de Argentina, Estados Unidos, México, Puerto Rico, Venezuela, Colombia y Costa Rica.
La experta argentina abordó el tema Construyendo transdisciplinaria e intersectorialmente entornos y prácticas de vida saludables en la niñez y la adolescencia: un abordaje sostenible, y aclaró que prefiere que se hable de entornos favorables y no saludables, porque se han dado experiencias en las cuales se han querido resolver los problemas con medicamentos.
Planteó la necesidad de desarrollar un sistema de protección integral, en el cual participen las familias, el Estado y la comunidad en su conjunto, para crear ambientes donde se respeten plenamente todos los derechos y se configure como un entorno protector.
Según dijo ahora los abordajes han ido cambiando, basado en nuevos paradigmas y en los cambios sociales y familiares que se observan en el mundo, como por ejemplo citó aquellos países donde ya se ha aceptado el matrimonio igualitario de parejas homosexuales, los cuales tienen hijos propios o adoptados. “Esto es una revolución total en cuanto al derecho de familia y a las políticas públicas”.
La expositora instó a las y los participantes a repensar los paradigmas y algunos conceptos que se emplean, así como a desarrollar abordajes esperanzadores porque según lo dijo, pese a todas las crisis, siempre hay potencialidades y capacidades que se pueden explotar.
El simposio se propuso como objetivo contribuir a la reflexión sobre los entornos y prácticas saludables y el programa incluye paneles de discusión en tres ejes temáticos: Prácticas socioculturales presentes en la promoción y formación de estilos de vida saludables en las personas menores de edad, Las políticas socioculturales y económicas dirigidas a niñas, niños, adolescentes y sus familias que propicien su desarrollo humano integral y Experiencias novedosas, vacíos y retos en la promoción de entornos y estilos de vida saludables en menores de edad y sus familias.
Para la Dra. Gloria Terwez Posada, de la Organización Panamericana de la Salud, es una corresponsabilidad de su representada, de las ONGs, de las instituciones estatales y de la sociedad civil facilitar los entornos saludables y seguros para el desarrollo y crecimiento de las personas.
Al referirse a algunos obstáculos que viven los niños y niñas en su desarrollo citó la falta de higiene, de espacios para jugar y estudiar, con espacios ruidosos, ambientes con violencia y actitudes hostiles.
La consultora considera que Costa Rica ha alcanzado notables progresos en el cumplimiento de metas en el campo de la salud, como son los indicadores de mortalidad infantil y de mortalidad de menores de 5 años, pero añadió que aún persisten desigualdades en el acceso a los servicios de calidad, al maltrato y la violencia intrafamiliar, a la explotación sexual y la pornografía infantil, al consumo de drogas, el embarazo precoz y no deseado, la educación, la cobertura y la calidad de los servicios de agua y de saneamiento, entre otros.
El ministro de Educación, Dr. Leonardo Garnier Rímolo, quien se dirigió a los jóvenes participantes en el simposio, destacó la necesidad de ayudarlos a desarrollar criterios de lo que es correcto e incorrecto para que puedan disfrutar la vida con equilibrio, porque todo lo que uno hace tiene riesgos. “Solo así tendremos gente más feliz”, enfatizó.
Según argumentó el ministro Garnier, la adolescencia es la etapa donde se comienza a formar la personalidad, en la cual los y las adolescentes se comportan como personas obedientes, muchas veces porque son manipuladas por los adultos por medio de la culpa y el miedo.
Agregó que los y las jóvenes se restringen de muchas cosas, porque temen hacer el ridículo o que los pongan en ridículo. Otra de las sensaciones frecuentes de esta población a criterio de Garnier es la sensación de soledad y de ser inadecuados, que les afecta su desarrollo y sus capacidades.