Universitarios protegen el ambiente

Desde hace muchos años la Universidad de Costa Rica (UCR) se ha preocupado por cuidar el medio ambiente de nuestro país. Es por eso que se han creado programas, proyectos e investigaciones dirigidos a cuidar no sólo Costa Rica, sino la región.

En la serie radiofónica Somos UCR del pasado jueves 12 de agosto, los invitados hablaron sobre este tema.

El Dr. Rosendo Pujol, director del Programa de Desarrollo Urbano Sostenible (Produs) comentó que los proyectos de trabajo final y tesis son de mucha ayuda para la gestión ambiental de la UCR en las diferentes comunidades.

Para muestra los proyectos de graduación de la Maestría de Gestión Ambiental y Eco Turismo, en la cual se ha realizado el único estudio del impacto ambiental del cultivo de truchas en Costa Rica, determinando las especies que son aptas para importar a nuestro país.

El trabajo principal que el Produs ha venido realizando desde 1991 cuando se fundó incluye los planes reguladores, cantonales y costeros, así como planificación costera, estudios hidrogeológicos en diversos cantones del país, como Pococí, Guácimo, Pérez Zeledón y otros, estudios de emisiones de contaminantes en San José, impacto ambiental de líneas eléctricas, impacto del transporte público y de carga, y muchos más.

El por eso que “ligar el presupuesto al número de estudiantes es lo más absurdo, porque una unidad académica se debe valorar por el conjunto de productos que la integran, y eso no tiene precio…” manifestó el especialista.

El programa Somos UCR se transmitió en Radio Universidad en 96.7 FM la semana pasada y trató sobre diferentes temas en los que la Universidad de Costa Rica ha trabajado en nuestro país, causando impactos positivos. Anel Kenjekeeva

El grupo interdisciplinario de trabajo contempla alrededor de doce carreras profesionales diferentes.

Sin embargo, el Dr. Pujol enfatizó que los problemas ambientales le pertenecen a las comunidades, es por eso que los universitarios requieren retroalimentarse con los conocimientos de los lugareños, para enrumbar positivamente las investigaciones. “El trabajo es interactivo, mutuo y a largo plazo, pues el problema no se va a resolver de hoy para mañana…” comentó el experto.

Es por eso que hay que priorizar los problemas y las soluciones, para que los gobiernos locales puedan ejecutar sus planes de acción y hacer conciencia en las personas sobre la importancia de cuidar el ambiente.

Investigación y acción social de la mano

Por otro lado, el Programa Institucional de Gestión Ambiental Integral (Progai), nacido en 2005 ha logrado integrar y articular las investigaciones de los diferentes institutos y unidades académicas de la universidad.

La Mágister Yamileth Astorga, directora de dicho programa asegura que éste integra la investigación con la acción social, de modo que se convierte en una ganancia de muchos.

La conductora del programa fue la Dra. Eleonora Badilla, Directora de Evaluación Académica Anel Kenjekeeva

Esto porque los investigadores aprovechan la información y por otro lado, se aplican soluciones a la problemática de las diferentes comunidades donde trabajan.

Uno de los aportes más importantes de este programa es haber definido la unidad de cuenca hidrográfica como la unidad de gestión, ya que el agua ha sido el elemento integrador del trabajo de todas las instancias universitarias que trabajan el tema ambiental.

De esta manera han logrado definir el impacto ambiental que reciben y emiten las diferentes cuencas y microcuencas de nuestro país, “empezando por casa” aseguró la Mag. Astorga.

Al respecto se han definido zonas de importantes inundaciones, y junto con las comunidades se ha buscado alternativas para solucionar los problemas.

Además, se ha realizado un plan de manejo de desechos sólidos y peligros, y aguas residuales de la UCR, para cuidar a las comunidades aledañas.

Así mismo el gobierno ha buscado los servicios del Progai para procesos muy importantes a nivel nacional. Este es el caso de la solicitud de ayuda del Ministerio de Salud con respecto al cierre técnico del lo que fuera el botadero Río Azul “… y el conocimiento que se está generando ahí desde el punto de vista hidrogeológico, de ingeniería civil, de ingeniería química y en la misma percepción social de las comunidades de alrededor y los problemas epidemiológicos que han tenido estas comunidades que viven alrededor de los rellenos sanitarios...” señaló la especialista.

El programa se transmitió en vivo y tuvo llamadas de radioescuchas que manifestaron su desconocimiento de todos los proyectos que la UCR desarrolla y que benefician a las diferentes comunidades de nuestro país. Anel Kenjekeeva

De igual manera enfatizó en que los beneficios son para toda la región centroamericana, ya que no existen estudios de esta naturaleza.

Kioscos ambientales

Por su parte el Lic. Mauricio Álvarez, geógrafo e integrante del programa Kioskos Ambientales de la UCR comentó que este programa ha sido de gran ayuda, no sólo para las comunidades que han visitado con información valiosa sobre el cuido del medio ambiente, sino como proceso de retroalimentación de los estudiantes con los conocimientos de los lugareños. Este ha sido la experiencia en Talamanca, con los bribríes y cabécares.

Así mismo, trabajaron en Puerto Viejo de Talamanca para orientar a la población en cuanto a los problemas ambientales que podría producir la instalación de una marina en la zona.

Kioscos Ambientales nació a raíz de la lucha que la UCR dio a raíz del TLC con Estados Unidos y según Álvarez, en esa oportunidad “…nos dimos cuenta de la deuda que la UCR tiene con la sociedad…”. Los kioscos viajan a través de todo el país llevando información valiosa sobre el medio ambiente. Es un proyecto de acción social, que toma muy en cuenta los conocimientos de las personas de las diferentes comunidades, para luego replicarlos y buscar soluciones a las problemáticas del ambiente.

Recientemente este programa se ha abierto a todas las carreras que imparte la UCR, es así como estudiantes de Administración, Economía y otras carreras que no son afines con el ambiente también participan. De esta manera complementan su formación humana, creando una mayor conciencia ambiental.