La biodiversidad de Costa Rica está seriamente amenazada ante presiones políticas y económicas internacionales y la falta de compromiso y transparencia de las autoridades nacionales, aseguraron especialistas durante la inauguración del II Congreso de Ornitología.
La actividad es organizada por la Escuela de Biología de la Universidad de Costa Rica (UCR) y la Unión de Ornitólogos de Costa Rica y se realiza del 26 al 30 de julio, con talleres, observación de aves, exposiciones de investigaciones y charlas magistrales a cargo de investigadores nacionales y extranjeros.
El Congreso se dedicó a los ecólogos e investigadores de la Universidad de Pensilvania. Dr. Daniel Janzen y Dra. Winifred Hallwachs, por sus aportes a la investigación y al conocimiento del Área de Conservación Guanacaste (ACG).
Ambos científicos, que tienen muchos años de residir en Guanacaste, expusieron algunas de sus investigaciones en la ACG en relación con aves y mariposas y enfatizaron en la necesidad de desarrollar una bioalfabetización de la gente, como medio para lograr la preservación de la diversidad biológica de Costa Rica.
El director de la Escuela de Biología, Dr. Gustavo Gutiérrez Espeleta, afirmó que la preservación de la biodiversidad se encuentra “ante el peor escenario en la historia de la humanidad, producto de presiones internacionales globalizantes irracionales y de la falta de compromiso y transparencia por parte de nuestros gobernantes”.
Citó como ejemplo la reciente decisión del Gobierno de Laura Chinchilla de no anular la concesión de minería a cielo abierto del proyecto Crucitas.
“En este contexto, la Escuela de Biología continuará con su compromiso de abogar por la formación integral de profesionales comprometidos con el desarrollo del país, particularmente en el desarrollo sostenible en armonía con la naturaleza”, aseguró Gutiérrez.
Por su parte, el Vicerrector de Investigación, Dr. Henning Jensen Peninngton, también se refirió a la necesidad de luchar por la conservación de la biodiversidad, “en un momento tan crítico como el actual, en el que en nuestro país se hacen patentes tendencias contradictorias en relación con este tema”.
Jensen citó al Dr. Emir Sader, reconocido teórico y politólogo latinoamericano, quien afirma que como resultado de algunos procesos políticos y económicos globales se está produciendo una regresión en la reafirmación de derechos humanos, entre estos el derecho a un ambiente sano.
“El derecho a tener un ambiente rico, diverso y preservado ha de ser uno de los derechos más importantes de la especie humana y del planeta en general”, dijo Jensen.
Según el académico, “hay una especie de restauración de políticas predemocráticas; o sea, políticas propias de épocas en las cuales todavía no se habían impuesto los grandes logros de los movimientos sociales del siglo XX”. “Hay una primitivización de la política”, añadió.
El biólogo Julio Sánchez, presidente de la Unión de Ornitólogos, se sumó a las críticas y recordó que en la reciente campaña electoral del país se abordó el tema de la biodiversidad y su conservación, pero “hoy nos damos cuenta que esto ni siquiera alcanzó para llegar a San Carlos”, expresó en referencia al proyecto Crucitas para la extracción de oro, que inició la empresa canadiense Infinito Gold Limitada, en Cutris de San Carlos.
“La deforestación y cultivos altamente contaminantes, como el banano y la piña, están envenenando nuestros suelos y nuestros ríos”, se lamentó Sánchez, quien insistió en que el estudio y la protección de las aves son de suma importante al ser indicadores de la salud de los ecosistemas.
Durante el acto de inauguración, se donó a las principales bibliotecas nacionales el libro Áreas importantes para la conservación de aves en las Américas, un proyecto liderado por la organización internacional BirdLife. El capítulo correspondiente a Costa Rica fue elaborado por la Unión de Ornitólogos.