Universidad de Costa Rica
La comunidad de Puerto Jiménez, en la zona sur del país, recibió recientemente un taller sobre prevención y tratamiento de la violencia familiar, con el fin de crear redes contra la violencia y formar líderes.
La capacitación fue impartida por la Dra. Luz Arlette Saavedra Romero, psicóloga mexicana que trabaja en el sistema de salud pública de su país en temas de prevención de la violencia. La visita de la Dra. Saavedra fue coordinada por el Programa Interinstitucional de Osa-Golfo Dulce (PiOsa) como parte de la acción social que ejecuta la UCR en esta zona del país.
Durante una semana amas de casa, líderes comunales, líderes religiosos y autoridades de la Fuerza Pública se capacitaron en la forma de identificar y prevenir distintos tipos de violencia y dar apoyo y orientación a las víctimas. Con la capacitación se pretendía formar promotores de la no violencia y fortalecer redes organizadas que traten el problema.
La Dra. Saavedra explicó que la prevención de la violencia es clave para evitar que las generaciones futuras se familiaricen con los ambientes de agresión y no se produzcan ciclos de violencia. Muchas de las formas de violencia de género se dan dentro de una relación de poder, donde alguien más fuerte domina a otro más débil y la sociedad lo legitima.
“Cuando hay una familia que es violenta, muy probablemente sus hijos varones serán violentos. Las hijas van a vivir relaciones violentas, van a permitir ese abuso, porque en general lo que vieron en su entorno era normal, entonces lo aceptaron, lo permiten y la pareja que van a buscar va a ser muy parecida de lo que tenían en casa”.
El curso impartido en Puerto Jiménez permitió que las y los participantes se sensibilizaran y definieran los elementos necesarios para tratar la violencia desde la comunidad. Por ejemplo, en esta zona se identificó que existen pocas facilidades para denunciar casos de violencia.
La Dra. Saavedra explicó que la violencia debe atenderse desde un modelo integrado que incluya atención médica y psicológica, rehabilitación y seguimiento. También es importante llevar un registro que permita conocer la magnitud del problema y tener un punto de referencia.
El diagnóstico temprano de la violencia es fundamental, por eso, es necesario que se investigue todo indicio de violencia que permita identificar casos y trabajar sobre los factores de riesgo. La especialista fue enfática en que la organización comunal es necesaria para identificar los casos de violencia.