El Consejo de Rectoría Ampliado, efectuado el pasado 16 de setiembre, dio un voto unánime de apoyo a la Dra. Yamileth González García, Rectora de la Universidad de Costa Rica, en torno a lo actuado para lograr un presupuesto adecuado para el 2010, tanto en el seno del Consejo Nacional de Rectores (Conare), como en la Comisión de Enlace.
Según lo dejaron patente las y los participantes, es absolutamente necesario firmar el nuevo acuerdo quinquenal del Fondo Especial para la Educación Superior (FEES) antes de finalizar el 2009, dado que las actividades de docencia, investigación y acción social que realiza la Institución y las otras universidades estatales, requieren de la seguridad económica que proporciona este acuerdo.
Se comprometieron a respaldar las gestiones y negociaciones que está llevando a cabo para lograr este nuevo acuerdo quinquenal del FEES, que potencie el desarrollo de las universidades estatales y permita una mayor contribución al progreso del país en la etapa de postcrisis.
La Dra. Yamileth González, ha reiterado que la suma otorgada para el 2010 no es la que la Universidad de Costa Rica merece y necesita para una expansión a plenitud, de acuerdo con los planes trazados. “Lo logrado, es apenas el mínimo aceptable, dadas las condiciones prevalecientes en el país y en el mundo. No obstante, representa un crecimiento del presupuesto 2010 en relación con el 2009, que permite continuar apoyando los diversos planes institucionales”.
En ese sentido ha expresado que nunca dejó de mostrar en el seno del Conare y en la Comisión de Enlace, su inconformidad con los montos señalados, considerando sobre todo que en tiempos de crisis la inversión en educación debe ser una prioridad nacional.
Fue por eso que inicialmente no firmó la propuesta gubernamental, porque quería estar segura de que las tareas esenciales de la Universidad de Costa Rica no se iban a ver perjudicadas. “De forma razonada y firmemente, insistí con los otros rectores, que ante la insuficiencia de la propuesta gubernamental y la imposibilidad de lograr un aumento mayor, buscáramos la forma de completar los presupuestos de las universidades reduciendo el monto destinado al Fondo del Sistema”.
Manifestó que aunque la lucha de la UCR ha sido intensa y en muchos tramos solitaria, pues las instituciones públicas de educación superior tienen diferencias importantes en cuanto a tamaño, estructura, planes de desarrollo y enfoques sobre cómo encarar el futuro, el acuerdo fue el producto de una intensa negociación tanto al interior del Conare, como dentro de la Comisión de Enlace. “Lo alcanzado no es lo esperado, pero le permite a la Institución caminar con decoro y asumir los compromisos establecidos para el 2010. No se puede ignorar el contexto de restricciones en que nos movemos, en el que muchas personas han visto disminuidos sus ingresos y el Estado costarricense también”.
Y, aunque la Universidad empezó a advertir desde el segundo semestre del año pasado sobre el sombrío panorama que se abría ante el país, muchos, incluyendo altos funcionarios del Gobierno, dejaron de tomar las medidas que correspondía. “Ahora el conjunto de la sociedad, incluido un grupo importante de la comunidad estudiantil de la UCR, debe enfrentar los costos de la crisis. Ciertamente, esos costos no son iguales para todos los sectores sociales ni para todas las instituciones”, concluyó la Rectora González.
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