Medidas frente a la crisis agudizarían problemas sociales

Dr. Leiner Vargas: “Debemos mantener e implementar el gasto social y la inversión pública con urgencia, lo importante es que la gente no pierda su empleo y que las empresas sigan funcionando” (foto José Salazar).

Las medidas del Gobierno costarricense para enfrentar los efectos de la crisis económica internacional agudizarán los problemas sociales y económicos a corto y mediano plazo, destacaron especialistas durante la última sesión de conclusiones del foro “Causas, dimensiones y consecuencias previsibles de la crisis financiera global y su impacto para Costa Rica”, organizado por la Universidad de Costa Rica (UCR).

El economista de la Universidad Nacional, Dr. Leiner Vargas Alfaro, criticó las acciones adoptadas por las autoridades económicas para paliar la situación actual.

“Se requiere una política fiscal de largo plazo consistente con la inversión pública, la ciencia, la tecnología y el gasto social. Esa es una deuda institucional en este país”, argumentó Vargas, quien se definió como un economista ecléctico e institucionalista.

El analista consideró que la política monetaria es vital para superar la recesión en el corto plazo y advirtió que Costa Rica no podrá salir adelante “si no tiene una reforma fiscal solvente en los próximos dos o tres años”.

“El crecimiento a largo plazo no se puede hipotecar por una frágil estabilidad de corto plazo”, insistió el Dr. Vargas, para quien la crisis es una oportunidad de llegar a un acuerdo nacional, porque de lo contrario “nos matamos unos a otros si nos olvidamos de la gente”.

Desde esta perspectiva, el profesional defiende la tesis de “mantener e implementar el gasto social y la inversión pública”, para que los trabajadores no pierdan su empleo y las empresas sigan funcionando en estos momentos de crisis.

Dijo que muchos economistas del país han hecho propuestas y advertido acerca de la dimensión y las características de la crisis, pero que la respuesta del Gobierno ha sido insuficiente para el tamaño de la crisis. “No estamos ni protegidos, ni vacunados, ni escudados contra la crisis”, afirmó.

El Dr. Manuel Rojas criticó durante su exposición la ausencia de propuestas y análisis de fondo por parte de los sectores políticos del país (foto José Salazar).

En relación con los recortes presupuestarios de los ministerios anunciados por el Gobierno, en particular del Ministerio de Ciencia y Tecnología, Vargas comentó: “Me duele en el alma la noticia que recibí, que un amigo como Guillermo Zúñiga (Ministro de Hacienda), esté tomando las medidas que está tomando, que se esté dejando de los liberales del Gobierno y esté llegando a esa situación, porque si eso se transfiere a la educación pública, a pensiones y a otras esferas, no vamos a estar escudados, sino profundizando la recesión”.

Políticos guardan silencio

El sociólogo y politólogo Dr. Manuel Rojas Bolaños, profesor de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), criticó en su exposición la ausencia de propuestas y análisis de fondo por parte de los sectores políticos del país, “que siguen moviéndose como si nada hubiera cambiado”.

Según Rojas, los partidos políticos han guardado silencio, con excepción del Partido Acción Ciudadana (PAC) y el Movimiento Libertario, lo mismo que los precandidatos y precandidatas, “que danzan al compás de una legislación electoral que corresponde a otros tiempos, y que además del efecto distractor que provoca, canaliza energías en una dirección equivocada”, sentenció.

Esta actitud, opinó, difícilmente logrará movilizar a la mayoría ciudadana, que ha perdido la credibilidad en la clase política y está preocupada en cómo salir adelante ante la crisis. “Como se dice –apuntó Rojas–, Nerón toca la lira mientras Roma arde”.

Para el conferencista, la crisis económica se circunscribe en un contexto de cambio de época y muy probablemente acelerará las transformaciones, que llevarán hacia nuevas relaciones entre el mercado y el Estado y a cambios en el aparato institucional.

El sociólogo aseguró que “estos cambios deben convertirse en un avance democratizador de la sociedad y de sus instituciones”, pero indicó que “no vienen solos, hay que empujarlos”.

Al referirse al proyecto de flexibilización laboral presentado por la empresa privada, el Dr. Jorge Arturo Chaves expresó que “no habría equidad si solo quedaran afectados los ingresos o empleos de los trabajadores, pero no los correspondientes al capital (foto José Salazar).

Necesidad de un diagnóstico

El Dr. Jorge Arturo Chaves Ortiz, economista especializado en ética de la economía y del desarrollo y catedrático de la Universidad Nacional, enfatizó en que cualquier plan o estrategia debe empezar por explicitar el para qué y para quiénes sirven todas las medidas que se adopten.

“Las preguntas para qué y para quiénes han sido muy divulgadas por Amartya Zen (Premio Nobel de Economía 1998), en lo que él llama conexión con la raíz ética de la economía y con la visión ética de la política. El para qué y a quiénes de las metas y de los medios no los fabrica el enfoque técnico de la economía, lo recibe del aspecto ético de esta”, afirmó Chaves.

Para el enfoque ético de la economía lo más importante no es el comportamiento moral de las personas o la ética profesional, que en el caso de la crisis se evidenció con los ya conocidos casos de corrupción de altos ejecutivos, empresas e instituciones, “porque son ciertos rasgos del actual estilo de crecimiento, las reglas del juego existentes y las propias instituciones financieras las que crearon e hicieron posible el atractivo y la oportunidad para la conducta corrupta”, explicó el conferencista.

Al referirse a las propuestas del “Plan Escudo” del Gobierno de Óscar Arias y al proyecto de ley de flexibilización laboral de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones de la Empresa Privada (Uccaep), Chaves manifestó que la equidad, la justicia y la solidaridad son valores que deberían entrar en juego a la hora de definir los objetivos de ambas estrategias.

Ello implica –detalló– examinar de qué forma cada medida afecta el empleo y la remuneración de los factores productivos, no solamente del trabajo, sino también de las utilidades del capital y de los sectores gerenciales.

“No habría equidad si solo quedaran afectados los ingresos o empleos de los trabajadores, pero no los correspondientes al capital. Tiene que explicitarse cuánto sacrificio de sus propias utilidades está aportando el capital”, expresó.

Dijo que también se requiere un proceso ético en la toma de decisiones, lo cual significa un diálogo nacional, en el que los distintos sectores sociales puedan plantear cómo se verían afectados por las medidas que se adopten. “Este proceso podría conducir a la identificación de intereses generales y comunes de la población costarricense”, concluyó el Dr. Chaves.