Niños y niñas en las carreteras

Los niños/as del CIL durante una tarde jugaron a ser peatones, conductores y señales de tránsito junto a las instructoras del Lanamme.

Un grupo de 24 alumnos/as de cuatro a seis años del Centro Infantil Laboratorio (CIL) de la Universidad de Costa Rica participaron en un taller sobre seguridad vial denominado Niños y niñas en las carreteras, organizado por profesionales del Programa de Infraestructura de Transportes del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) con el fin de que la población infantil reconozca y pueda utilizar correctamente las señales de tránsito.

Por medio de la creación colectiva, los juegos, los dibujos y las preguntas, los y las niñas establecieron diferencias entre lo ideal y la realidad en las carreteras, aceras y zonas de seguridad y el comportamiento de los adultos al caminar y conducir.

Para la ingeniera civil Tatiana Muñoz Córdoba, la psicóloga Ana María Arroyo Acosta y ingeniera química Ellen Rodríguez Castro, organizadoras de la actividad que tubo una duración de noventa minutos, la experiencia de este primer taller fue muy enriquecedora, por el aporte que dieron los participantes y la facilidad con la que captaron el mensaje.

Se mostraron sorprendidas por la manera en que los pequeños recordaron las actitudes de los adultos en las carreteras y la forma como pudieron diferenciar el estado o la ausencia de las señales de tránsito, de las aceras, la demarcación y las vías.

Los pequeños aprovecharon la oportunidad de hablar sobre lo que consideraban malos hábitos de los adultos.

Taller experimental

Entre todos/as construyeron una calle de dos vías, una zona peatonal, aceras y colocaron los semáforos, altos y paradas de autobús.

La experiencia con los alumnos y alumnas del CIL creó la expectativa en otros centro educativos, por lo que las organizadoras ya cuentan con varias peticiones para impartirlo de nuevo. No obstante también se han planteado la posibilidad de establecer un Trabajo Comunal sobre el tema de seguridad vial para que realice esta labor educativa.

El taller que tuvo carácter experimental incluyó seis actividades, primero enseñaron los conceptos, los significados y formas de las señales de tránsito. Luego los niños y niñas armaron una carretera, con el material que elaboró el diseñador gráfico Mauricio Bolaños de PITRA.

Posteriormente los pequeños “transitaron” por las vías y aceras adoptando diferentes roles: un peatón con discapacidad, un hombre con niños, una mujer con un bebé, un conductor de bus con pasajeros, un chofer de camión, un ciclista, un motociclista y señales de tránsito.

Dibujando la experiencia fue el nombre de otra actividad, en la cual los y las niñas expresaron gráficamente sus vivencias en las calles.

Luego hubo una evaluación en grupo con los y las participantes para que expresaran oralmente lo que habían sentido y aprendido. En ese momento las organizadoras se dieron cuenta de que ya los niños y niñas había incorporado a su lenguaje palabras como peatón, zona de seguridad y parada de autobús.

La última actividad fue enviar un mensaje a las familias que consistió en un librito para colorear, con lecturas sobre el tema.

Ellen Rodríguez y su hijo Allan Obando junto a los dibujos sobre seguridad vial que realizaron los niños y niñas del Centro Infantil Laboratorio.

Más allá del CISEV

El coordinador del PITRA Ing. German Valverde González explicó que uno de los objetivos del I Congreso Ibero-Americano de Seguridad Vial (CISEV) que se realizó en mayo del 2008 era precisamente la proyección del tema hacia el resto de la sociedad.

Por esta razón se pensó en el taller de preescolar, pero también esperan en el futuro trabajar el tema con adolescentes, “porque son ellos la parte de la población que más se muere en carreteras” añadió Valverde.

También mencionó que realizarán un seminario de capacitación con inspectores de tránsito, como una actividad de extensión de la Vicerrectoría de Acción Social. Además se elaborará un manual de sistemas de contención vial (barreras en carreteras) para que sea utilizado por el Ministerio de Obras Públicas y Transportes.

Sobre el taller en el CIL el Ing. Valverde lo considera una buena experiencia a la que quieren darle continuidad. Agregó que es conveniente replantear algunos conceptos con la retroalimentación que recibieron de los niños y niñas del Centro Infantil, quienes señalaron algunas inconsistencias, entre lo que les enseñaron en el taller y el entorno en que ellos y ellas se desenvuelven todos los días.

“Ese contraste que ellos encuentran hace que esos ciudadanos del futuro, tengan la conciencia de la calidad de la infraestructura que se necesita en el país, para tener seguridad. Ellos cuando sean adultos van a exigir esa infraestructura” añadió el especialista.