Con la idea de intercambiar experiencias sobre la labor que se desarrolla en el país en el campo de la psicología comunitaria, profesionales, docentes y estudiantes de esa disciplina de la Universidad de Costa Rica y de la Universidad Nacional participaron en el Primer Encuentro Nacional de Psicología Comunitaria Esmeralda Arce Arias, que se desarrolló el 26 y 27 de agosto.
Según comentó el coordinador de la actividad Lic. Carlos Arrieta, el objetivo que se propusieron fue compartir experiencias y tratar de crear las condiciones para ir consolidando una red integrada en este campo de la psicología para investigación e intervenciones necesarias.
El director de la Escuela de Psicología, M.Sc. Manuel Martínez Herrera, explicó que organizaron este encuentro para crear un espacio en el cual pudieran compartir no solo las experiencias, sino también ideales y esperanza. Esta actividad “tardó mucho” y “llega un tiempos aciagos de crisis donde campea el individualismo y el sálvese quien pueda, pero también viene en momentos de un renacimiento de las esperanza y del alma de la Patria, donde nos hemos mostrado como sociedad y como comunidad, que un mundo mejor es posible”.
En su opinión la psicología comunitaria está llamada a tener en el país un papel protagónico, “en la comprensión y discernimiento de las causas estructurales que subyacen a los conflictos sociales, aportando ciencia, método y técnica en la construcción de este mundo mejor que todos soñamos”.
En el encuentro se abordaron temas como comunidades transnacionales y resiliencia, gestión de riesgo en comunidades, rescate de la construcción social de la salud, la prevención de las adicciones, violencia social, la socialización y des-escolarización en tiempo de globalización, acción comunitaria contra la explotación sexual comercial, participación en la gestión integral de residuos sólidos, trabajo con indígenas, entre muchos otros.
La Dra. Mónika Flochová, de la Escuela de Psicología de la Universidad Nacional explicó que la experiencia les deja la enseñanza de que se requiere por parte del profesional en psicología de una escucha activa y trabajar a partir de las necesidades de la comunidad y en forma conjunta construir la estrategia de intervención y búsqueda de soluciones con las personas de la comunidad.
Dedicatoria especial
En el acto de inauguración se le rindió un homenaje a la Licda. Esmeralda Arce Arias, psicóloga quien se formó en la década de los años 80 en la Universidad de Costa Rica, se desempeñó como Presidenta de la Asociación de Estudiantes y quien destacó por su vida entregada a la psicología comunitaria.
Ella falleció el 12 de febrero del 2007 en un accidente de tránsito en la carretera interamericana cuando se dirigía hacia Nicaragua, en función de su trabajo.
El director de la Escuela de Psicología de la UCR dijo que le dedicaron esta actividad a su memoria, porque “estamos convencidos de que los valores y principios que defendió Esmeralda Arce con tesón, inteligencia y persistencia son los mismos que nos convocan en este recinto”.
Ignacio Dobles, profesor de esa unidad académica destacó de ella su constancia, coherencia, humor y capacidad de trabajo con la gente. Dijo que su vida estuvo sellada por el compromiso y la solidaridad; y recordó la influencia que tuvo en su quehacer profesional la ideología de Ignacio Martín-Baró, psicólogo social y sacerdote jesuita español, quien murió en El Salvador en 1989.
Dobles le reconoció el mérito de haber desarrollado un enorme caudal de trabajo con diferentes grupos organizados dentro y fuera del país. “A mí me queda la sonrisa llana, la mirada inquieta, la conversación fluida, de una joven que una vez se asomó a estas aulas para asumir el compromiso con la gente y eso no es poca cosa, sobre todo en estos tiempos en que se descompone y se pudre nuestro país”, afirmó el docente.
Por su parte, Victoria Ruiz, compañera de Esmeralda Arce en la Asociación Centroamericana para la Economía, la Salud y el Ambiente ACEPESA, en la que Arce fue fundadora y presidenta, destacó su liderazgo, su arduo trabajo, creatividad, vitalidad, su compromiso y sus propuestas certeras, que ayudaron a consolidar a esa asociación en el campo del saneamiento ambiental y en el turismo.
Recordó su empeño en la organización y conformación de microempresas turísticas como opción viable para el desarrollo de las comunidades, a nivel centroamericano.
Ruiz aseguró que su trabajo alrededor de este tema, al lado de otras organizaciones, permitió que el turismo rural comunitario fuera reconocido por el Instituto Costarricense de Turismo como un producto turístico para la promoción internacional y recientemente fue declarado de utilidad pública para el Estado.
Otro de los proyectos que impulsó como presidenta de esa organización es el programa para manejo sostenible de residuos sólidos y líquidos y especiales como los residuos electrónicos, para responder a la problemática ambiental.
Repitió una frase de Esmeralda Arce que decía “Hay que creer en la magia de los pueblos, para construir sueños y empujar realidades”
Doña Fanny Arias, agradeció el homenaje que se le rindió a su hija. “No importa los años que vivamos, lo que importa es el camino que hayamos hecho al partir y eso me llena de satisfacción y orgullo, porque mi hija cumplió con su compromiso. A veces creemos que solo los grandes de la política y de la economía hacen camino y dejan huella, pero todos los días desde las oficinas, hasta la cocina humilde del ama de casa campesina o en el campo de labranza, se hace camino al andar”, manifestó
Esta actividad contó con el apoyo del Colegio de Psicólogos de Costa Rica.
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