El vestíbulo del edificio administrativo A de la Universidad de Costa Rica dejó atrás el normal bullicio estudiantil para transformarse en espacio de exposición y contemplación de la obra de tres grandes artistas costarricense: Grace Herrera Amighetti, Luis Paulino Delgado Jiménez y Néstor Zeledón Guzmán.
La muestra reúne una selección de las creaciones de estos tres baluartes del arte nacional, quienes fueron reconocidos como profesores eméritos de la Escuela de Artes Plásticas el año pasado.
Al respecto, el grabador y director de la Escuela de Artes Plásticas, Alberto Murillo Herrera, expresó que “el reconocimiento que ha hecho la Universidad de Costa Rica a la profesora y profesores jubilados Grace Herrera Amighetti, Luis Paulino Delgado Jiménez y Néstor Zeledón Guzmán, no es fortuito y tiene su génesis en su dedicación indiscutible al desarrollo de la vida académica universitaria, las artes plásticas costarricenses y su valioso aporte a la cultura nacional”.
Esta exposición es auspiciada por la Escuela de Artes Plásticas y la Vicerrectoría de Administración, y permanecerá abierta hasta el 9 de diciembre.
Obras expuestas
La artista Grace Herrera expone cuatro obras de formato grande en técnica mixta sobre papel hecho a mano. Dos de ellas sobre paisaje abstracto denominadas “Marina” y “Arenal”. La primera es propiedad de la UCR y se encuentra en la Vicerrectoría de Acción Social, la segunda está en calidad de préstamo en la Oficina de de Asuntos Internacionales y Cooperación Externa.
Las otras dos obras: “Pectoral” y “Cotona y Cruz” pertenecen a la serie Memoria ancestral y están inspiradas en trabajos hechos por pueblos primitivos. Ambas son propiedad de la artista.
La artista Herrera Amighetti agradeció la oportunidad de participar en esta exposición, la cual es un gran estímulo y reconocimiento que le ofrecen a los profesores eméritos.
Por su parte, el artista Luis Paulino Delgado presenta tres grabados: “Puriscal”, dedicado al abuelo de sus primos, Rosa Quesada, a quien en las tardes le gustaba compartir con ellos y con él en el jardín frente a un árbol en donde acercaba un sillón de mimbre para dirigir los juegos y narrarles cuentos.
El grabado “Federico con su prima Adriana” dedicado a su único hijo, y “Madame Weilyn”, en homenaje a esta dama quien a sus 80 años le sirvió de modelo cuando estudiaba en Búfalo, Estados Unidos, a principios de los años setenta, y que según se dice, en su juventud fue modelo de Picasso en París. A ella la incluyó en el mundo de las modelos con el color rojo para significar que no importa la edad para tener vida.
Según dijo el artista Delgado su gusto por el grabador viene desde su infancia, pues procede de una familia de artesanos. Además de la admiración que siempre sintió por la obra de don Francisco Amighetti, quien fue su profesor, y de la influencia que recibió de artistas estadounidenses como Frank C. Eckmair, Paul Martin, docente del Centro Regional de las Artes Gráficas (Creagraf ), y de sus colegas Anthony Gorng y Phil Smith.
A él le encanta el grabado en blanco y negro y por supuesto la cromoxilografía. También ha practicado la litografía y el grabado en metal.
Asimismo, el artista Néstor Zeledón Guzmán expone dos esculturas “Maternidad”, que es una talla directa en Guanacaste, y “El domingueño”, otra talla directa en cedro. También exhibe cuatro dibujos hechos en tiza papel: “Secundino”, “María Engracia” y “Los elotes”, realizados en 1995, y “La Tapisca”, en el 2002.
Acerca de los artistas
Acerca de la artista y profesora Grace Herrera Amighetti, el grabador Alberto Murillo expresó que “ha realizado aportes importantes en el desarrollo de las Cátedras de Pintura y Diseño, la consolidación de la acuarela costarricense, y se le considera un bastión importante en el desarrollo de la investigación en las artes como pionera en la disciplina del papel hecho a mano, en su uso como soporte artístico y como medio de expresión plástica a partir de fuentes nativas”.
Del profesor Luis Paulino Delgado Jiménez comentó que, “además de considerársele el eslabón que mantuvo unida la tradición del grabado en madera, iniciada por Francisco Amighetti, con las nuevas generaciones, es gestor del currículo académico que ha regido nuestro accionar en la Escuela de Artes Plásticas en los últimos treinta años”.
También apuntó que, “durante su estancia en la Escuela ocupó los cargos de Director y Decano de la Facultad de Bellas Artes, dejando su impronta en la vida académico-administrativa de nuestra institución”.
Asimismo, del escultor y docente Néstor Zeledón Guzmán, Murillo señaló que “ha dejado un legado importante que se ha visto reproducido en las generaciones jóvenes por medio de nuestros docentes de la Cátedra de Escultura, a quienes directa o indirectamente podemos considerar discípulos de don Néstor”.
Añadió que “su aporte a la cultura nacional y a la escultura costarricense se ve reflejado en el reconocimiento recibido con los máximos galardones a la cultura otorgados en nuestro país, los premios Aquileo J. Echeverría y Magón”.
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