La Biblioteca de la Facultad de Letras de la Universidad de Costa Rica ha sido designada con el nombre de la Dra. Virginia Zúñiga Tristán, Profesora Emérita de la Universidad de Costa Rica, quien dedicó su vida a la enseñanza y el estudio de las lenguas modernas.
El Consejo Universitario acordó que la Biblioteca de la Facultad de Letras llevara el nombre de la Dra. Zúñiga considerando sus reconocidos servicios a la educación y a la cultura costarricense, a solicitud de la Escuela de Lenguas Modernas y la Asamblea de Facultad.
Doña Virginia Zúñiga, quien falleció en el año 1996, se destacó por su gran riqueza intelectual, sus atestados académicos de alto valor y por haber recibido reconocimientos a escala nacional e internacional. Además se le recuerda como una mujer tesonera, de carácter inquebrantable y amante de la música clásica.
La Dra. Zúñiga Tristán fue galardonada en dos ocasiones con el “Premio Nacional Aquileo Echeverría” por sus libros; El anglicismo en el habla costarricense (1976) y La Orquesta Sinfónica Nacional (1992). Asimismo, Francia honró la labor educativa y cultural de la Dra. Zúñiga Tristán concediéndole la Medalla "Charles Baudelaire" (1972) y las “Palmas Académicas” con el Grado de Gran Caballero (1973).
Doña Virginia trabajó con dedicación y amor por la Universidad de Costa Rica, especialmente en la Facultad de Letras, donde se desempeñó como Profesora y Directora de la Escuela de Lenguas Modernas, además fundó y dirigió la revista de Artes y Letras Káñina.
A ella se le reconoce la iniciativa de que la Universidad de Costa Rica adquiriera las fincas donde actualmente se encuentra la Facultad de Letras, la construcción de la biblioteca de esa Facultad y la donación de su colección personal de libros a dicha biblioteca y a la Biblioteca Carlos Monge Alfaro.
En una asamblea ampliada de la Escuela de Lenguas Modernas efectuada el jueves 31 de mayo del 2007 se celebró el homenaje a doña Virginia. A la actividad asistieron autoridades universitarias, profesores pensionados, familiares y amigos de la homenajeada.
El Lic. Francisco Hernández Mata quien fuera como un hijo para doña Virgina ofreció una semblanza en la que destacó que ella fue una verdadera maestra, siempre comprometida con la superación de la universidad, de los docentes y los estudiantes de Lenguas Modernas.
Su sobrina, la Magistra Isabel Araya Tristán recordó la personalidad emprendedora y dedicada de su tía y su labor impulsora en la Escuela de Lenguas Modernas donde trabajó incansablemente aún después de pensionada.
En el acto se develó la placa con el nombre de la biblioteca junto a la puerta principal. Además, Rómulo Vega González ofreció un acto cultural con la interpretación de música isabelina, canciones del siglo XVI en inglés antiguo y música de laude.
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