¡A votar!

El Presbítero Guido Villalta, Juan José Echeverría, Henning Jensen, Monseñor Hugo Barrantes y Miguel Gutiérrez Saxe, comentaron sobre la importancia del sufragio en la actual coyuntura del país.

Representantes de diversas instituciones nacionales, incluidas las Universidades Públicas, realizaron un llamado a la ciudadanía costarricense para que el próximo domingo 5 de febrero ejerzan su derecho al voto y participen como miembros de mesa para asegurar la transparencia del proceso.

En la sede del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) el Arzobispo de San José, Monseñor Hugo Barrantes; el Rector a.i. y Vicerrector de Investigación de la Universidad de Costa Rica, Dr. Henning Jensen Pennington; el Presidente Ejecutivo del IFAM, Juan José Echeverría; la Defensora de los Habitantes, Dra. Lizbeth Quesada; el Coordinador del Proyecto Estado de la Nación, Dr. Miguel Gutiérrez Saxe; y el Coordinador de Programas Electorales del TSE, Héctor Fernández, motivaron a la población a defender mediante una participación activa el derecho al sufragio directo, limpio y secreto que se logró en Costa Rica desde el siglo pasado, incluso con derramamiento de sangre.

Héctor Fernández, recordó a los y las ciudadanas la importancia de que se involucren no solo acudiendo a las urnas como lo establece la Constitución Política, sino aportar su trabajo para recibir el voto de los electores.

Para el actual proceso electoral el TSE ha dispuesto un total de 6.163 Juntas Electorales, de las cuales 236 aún no cuentan con miembros de mesa lo que podría provocar contratiempos en la votación de algunas poblaciones. Para suplir este faltante cualquier ciudadano o ciudadana mayor de edad se puede inscribir directamente ante el TSE en la línea de contingencia 800 ELECTOR, de 6:00 a.m. a 7:00 p.m., hasta el viernes 3 de febrero, inclusive.

En nombre de las Universidades Públicas, el Dr. Henning Jensen, Rector a.i. de la UCR, invitó al pueblo costarricense a participar en la fiesta electoral.

Monseñor Hugo Barrantes, manifestó por su parte que acudir a las urnas electorales es un deber ciudadano y un compromiso cristiano, pues la vida en un sistema político democrático no podría desarrollarse provechosamente sin la activa, responsable y generosa participación de todos. “No se entiende cómo si la democracia es el gobierno del pueblo y para el pueblo, las personas no ejercen soberanamente ese derecho para legitimar el poder de nuestros gobernantes”, añadió.

La Dra. Lizbeth Quesada, fue enfática al manifestar que si bien comprende el desánimo y la falta de credibilidad de la población, que sólo en el 2005 presentó ante la Defensoría de los Habitantes 22 mil denuncias ante el incumplimiento de promesas de la clase política, existe una responsabilidad ciudadana de ir a votar porque ningún país o democracia pueden caminar solos. “Sólo podemos exigir a nuestros gobernantes cuando responsablemente participamos y garantizamos la transparencia del proceso”, acotó.

En representación de las Universidades Públicas, el Dr. Henning Jensen, manifestó que dado que la democracia nos da la posibilidad y capacidad para realizar las ideas de libertad, equidad y justicia, es vital la participación de la ciudadanía en la definición de su propio destino.

A su juicio la única forma de que en el país logremos un equilibrio en medio de la diversidad, conciliar lo heterogéneo y tender puentes entre lo diferente con miras a la inclusión, es mediante la participación política que permite a los y las ciudadanas tomar parte en la autodeterminación nacional, anticipar y corregir en el presente, aquellas tendencias que facilitan un desarrollo negativo del futuro y propiciar una sociedad más justa, libre y equitativa.